Doctor Who: The Time of the Doctor

ADVERTENCIA: ¡SPOILERS! (Léase con voz de River Song)

Desde hace años, la Navidad tiene un matiz diferente para todo aquél que se dice whovian, y quizás 2013 ha sido el año donde ser seguidor de Doctor Who ha marcado una diferencia más grande con respecto a las emociones del resto de la gente en estas fiestas. Todos sabíamos que este año el especial de Navidad de la serie más longeva sería emocionalmente más intenso, con la salida del actor Matt Smith como el Doctor número 11 (o 12… o 13, según el ángulo con que se analice). ¡Y así fue!

Una vez más, BBC Worldwide nos deleitó con la transmisión simultánea de este esperado especial. Con 60 minutos de duración (17 menos que The Day of the Doctor, pero 20 más que un episodio habitual en la serie), resultó evidente que el reto de The Time of the Doctor tras el reciente especial de 50 aniversario era alto, pues no solamente habría que decir adiós a un rostro del Doctor, sino responder algunas incógnitas pendientes –en especial a los fans más exigentes– establecer las bases para la temporada 8 de la nueva era de la saga, introducir a la nueva regeneración del Señor del Tiempo y… ah, sí: incluir una temática navideña, para no perder el contexto del especial.

Steven Moffat vuelve a demostrar con maestría que no es el jefe creativo de las 2 series inglesas más exitosas sólo porque sí: el ritmo del especial es vertiginoso desde su inicio hasta el último instante, llevando nuestras emociones por una montaña rusa de emociones… aunque quizás con un ritmo demasiado acelerado, pues había muchas cosas que decir, y poco tiempo para hacerlo.

Así, pudimos ver a los Dalek, los Cyberman, el Silencio y los Ángeles Llorones combinados en un sólo episodio, sin saturar la trama, pero quizás sin el brillo suficiente por el apremio a explicar y concluir tantas cosas. Curiosa pero acertada, la elección de Jamie Payne para dirigir el especial, considerando que solamente estuvo al frente de 1 episodio de la serie. No obstante, su visión femenina resultó correcta y templada en el aspecto emocional y nostálgico del episodio navideño.

Con un galante y hondamente emocional Smith y una cordial Jenna Coleman sosteniendo el peso del episodio en sus hombros, el balance entre acción, comedia y nostalgia no podían resultar más correctos. El Doctor se embarca en una última aventura donde un llamado de auxilio atrae a los adversarios más famosos y poderosos del Señor del Tiempo, en lo que resulta ser una encrucijada que obliga al onceavo doctor a permanecer en el sitio de Trenzalore –planeta que supuestamente sería su tumba, según el último episodio de la temporada 7– durante 300 años, mostrándonos a un anciano pero aún luchador Doctor, listo para una batalla final, sin ases bajo la manga, pero siempre listo para enfrentar a sus adversarios.

Podríamos decir que lo malo en The Time of the Doctor es precisamente el apuro de decir tanto en tan poco tiempo, además de una temática navideña que llega a sentirse forzada y hasta estorbosa a momentos, con un inaudito pueblo ubicado en un planeta del que esperábamos mucho más (según lo mencionado en The Name of the Doctor). Y sí: fue emocionante tener la tan esperada incógnita sobre cuántas veces se ha regenerado el Doctor hasta ahora y por qué habría una 14ava regeneración cuando el límite establecido en el episodio “The Deadly Assassin” (1977) indicaba que éste era el final del Señor del Tiempo. El problema es que la explicación resultó algo apresurada y hasta cierto modo inconclusa, pues es la deducción la que nos lleva a concluir que los Maestros del Tiempo concedieron un nuevo ciclo al Doctor, similar a lo sucedido con El Amo en aquél especial de 30 aniversario, The Five Doctors (1983).

¿Y no les pareció demasiado efímera la presencia de Peter Capaldi como el nuevo Doctor, justo al final? ¡Se sintió tan apresurada!

Así, muchas dudas quedaron respondidas, pero de algún modo, nos queda la sensación de que se necesitaron explicaciones más detalladas. ¿Qué consecuencias tendrá el nuevo ciclo de regeneraciones otorgadas al Doctor? ¿Por qué –además del obvio “permiso” de Moffat a Smith para despedirse– el Doctor volvió a ser joven antes de regenerarse? ¿De qué forma encontrará Gallifrey (su planeta natal), sin que medio universo trate de iniciar una nueva Guerra del Tiempo? Y sobre todo… ¿a qué se debe esa aparente e inexplicable amnesia justo al final? Bueno, habrá que dar el beneficio de la duda a Moffat y al buen Doctor, que  al fin y al cabo, hace años acertadamente su serie se llamó en Latinoamérica… Doctor Misterio.

¿Qué les pareció el discurso final de Matt Smith El Doctor y el arrebatador cameo de Amy Pond (Karen Killian con peluca, pues se rapó para Guardians of the Galaxy)? Sin duda, para quienes siguieron el onceavo rostro del Doctor durante 44 episodios, no podría haber momento más emotivo que éste, tanto para ellos detrás de la pantalla como para nosotros al frente de ella.

¡Qué forma de celebrar el episodio 800 de la serie! Y nos dejó claras algunas cosas: Nadie como Matt Smith. Nadie más que porte aquella corbata de moño y colorado fez. No más “¡Jerónimo!” de nuestro hombre desarrapado (al menos hasta el 60 aniversario).

¿Lo extrañaremos? ¡Sí! ¡Larga vida al Doctor, y bienvenido Peter Capaldi para otoño de 2014!

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Julio Vélez Colaborador en web y revista Cine PREMIERE desde 2006. Me especializo en anime/manga, comics, doblaje, tecnología y videojuegos. Mis sagas favoritas: Doctor Who, Star Trek, Dragon Ball y Star Wars. Batimaníaco, geek ochentero y hardcore gamer.