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Cine

Bus 657: El escape del siglo

11-11-2015, 4:57:28 PM Por:
Bus 657: El escape del siglo

Combina elementos del género heist, pero su guión arbitrario lo deja muy lejos de ser “el escape del siglo”.

Cine PREMIERE: 1.5
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¿Recuerdan lo que hacía emocionante a Máxima velocidad (Speed) sin importar lo disparatadas que pudieran resultar las situaciones que presentaba? Dentro de su convención, la película que puso en el mapa a Sandra Bullock tenía un gran manejo del ritmo, del conflicto y mantenía la atención para ver cómo diantres Keanu Reeves evitaría que una bomba hiciera explotar a un camión lleno de pasajeros. El fallecido Tony Scott hizo algo parecido con Denzel Washington y Chris Pine en Imparable (Unstoppable), en 2010, cuando un tren cargado con material peligroso se sale de control. La película se sostiene a través de un constante suspenso en movimiento y una certera combinación de planos y situaciones personales de los personajes. 

Bus 657: El escape del siglo (Heist), en cambio, enlaza ciertas características de las películas de atracos con la idea de un vehículo en movimiento que no debe detenerse. Sin embargo, su título es demasiado ambicioso para lo que en realidad ofrece, pues es un pastiche de otros filmes hilado a través de absurdos personajes mal delineados y un director –Scott Mann– empeñado en conseguir un “final feliz”. 
Para ello, el guión de Stephen Cyrus Sepher y Max Adams da vuelcos supuestamente inesperados que terminan por marear y que en más de una ocasión están poco o nada sustentados. Las acciones parecen fortuitas y, al final, resulta que todo forma parte de un plan perfectamente orquestado, pero incapaz de convencer al cinéfilo moderno.

Bus 657: El escape del siglo se centra en Vaughn (Jeffrey Dean Morgan), el exprotegido del dueño de un casino (Robert De Niro), a quien le pide una importante suma de dinero para atender a su hija que yace enferma en un hospital. Como el préstamo le es negado comienza a planear un golpe al imperio con un hombre al que acaba de conocer, Cox (Dave Bautista), y con quien sólo ha tenido un brevísimo encuentro. 

El armado del plan es dinámico y mientras los involucrados se coordinan, el director comienza el montaje de la hazaña combinando escenas de acción nocturnas con la calma de un restaurante, en donde Jeffrey Dean Morgan explica a sus cómplices los pasos que hay que seguir. Nada sale como se espera y los ladrones terminan huyendo en un autobús y tomando a sus pasajeros como rehenes, lo que comienza una persecución que se desenvuelve a lo largo de una hora de película.

El principal problema de Bus 657: El escape del siglo es que las acciones son demasiado forzadas, predecibles o sencillamente no tienen sentido. Vemos a una Gina Carano como una policía que deja huir al autobús sólo porque uno de los asaltantes se lo pide “de buena manera”. Los pretextos que desatan la psicopatía de Cox para poner en riesgo a los pasajeros y aumentar el suspenso lucen vacuos: los enmarcan diálogos poco ingeniosos e insulsos, verdaderas joyas de la falta de imaginación. La cinta es entretenida si uno se deja llevar por el ilógico viaje que propone pero definitivamente está muy lejos de ser el “escape del siglo”. 

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autor No soy la Madre de los Dragones, pero sí de @Enlabutaca; desde ahí y en Cine PREMIERE estoy en contacto con las buenas historias. Melómana, seriéfila, cinéfila, profesora universitaria, y amante de las bellas artes. Algún día escribiré una novela de ciencia ficción. ¡Unagui!
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