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Cine

Leyenda

15-02-2016, 7:49:49 PM Por:
Leyenda

Una película plana con una excelente actuación de Tom Hardy.

Cine PREMIERE: 3
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Las películas de gángsters y/o de mafia ya son un tema que lleva una estructura que es fácil identificar, con traiciones, complots y demás. Sin embargo, sigue siendo un asunto que nos causa morbo e interés. 

En esta ocasión Brian Helgeland decide entrarle a la materia de los hermanos Kray, unos londinenses expertos en el crimen organizado, y hacer algo de lo cual Martin Scorsese ya es todo un maestro produciendo. Pero por desgracia, Helgeland no llegó a los resultados buscados.

Y no es una cinta que no se deba ver o que sea aburrida, sino que simplemente uno no llega a la empatizar del todo con la trama. Uno como espectador no se engancha pues el guión deja muchos cabos sueltos en cuanto a personajes y problemas que surgen.

La historia narrada por la esposa de Reggie Kray, Frances Shea (Emily Browning), cuenta el caso real de dos gemelos (ambos interpretados por Tom Hardy) dedicados al robo y extorsión en el East End de Londres. La relación entre esos dos hombres es un tanto problemática pues Reggie es el hermano más estable que intenta controlar a Ron, a quién se le acusa de ser psicópata y esquizofrénico. Sin embargo, los gemelos logran escalar hasta lo más alto del respeto gángster, haciéndolos intocables. 

Todo se oye muy cautivador ¿no? Y pudo llegar a serlo si se hubiera ejecutado de la manera correcta y si se hubieran saltado todos los clichés que tienen las cintas relacionadas a la mafia. Además, durante la película, uno está esperando a que algo extraordinario suceda, algo que nos deje boquiabiertos. Pero de principio a fin nos deja con esas ganas de que algo sorprendente suceda pues la única emoción que causa la trama es la indiferencia. Es más, no se explotan ninguno de los eventos que son parte de la historia, incluso un elemento tan shockeante como podría ser la muerte, y más dentro del género de mafia, no nos hace sentir empatía por los personajes.

Pero no pierdan las esperanzas, pues la actuación de Tom Hardy no sólo es rescatable, sino que es impecable. El actor logra que se nos olvide completamente que sólo es él interpretando a los dos y a cada gemelo le da su propio estilo y psicología.

Al final lo único legendario de la cinta de Brian Helgeland es la trascendencia que está dejando Hardy, cuya actuación en The Revenant ya está en camino hacia un premio de la Academia.

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autor Cineasta que cree que el cine no se debería de clasificar en "cine de arte o comercial" sino "cine bueno o cine malo"
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