Un enredo amoroso
Una cinta de trama trillada y con chistes burdos que simplemente no logra entretener.
Ésta es una de esas películas que al verlas uno se pregunta: ¿por qué se estrena en cines? O vayámonos más lejos: ¿quién dio luz verde al proyecto y por qué?
Empecemos por la historia: Angela (Heather Graham) está casada con Curtis (Jerry O’Connell), ella es publicista y él abogado, ambos exitosos en su rama, sin embargo, un embarazo no planeado traerá caos a sus vidas. A ellos se les unen Danny y Sylvia (John Corbett y Katie Finneran), un matrimonio disfuncional cuyo único rol en el filme es dar malos consejos a los protagonistas.
Aunque la trama no es nueva, existen filmes que toman el tema y lo transforman en una propuesta interesante –pensemos en Ligeramente embarazada– y es justo esto en lo que falla Un enredo amoroso. La película se estanca de tal manera en sus burdos chistes –desde vómitos, flatulencias y hasta masturbaciones–, que la historia pasa a segundo plano. No hay un personaje con el que resulte fácil identificarse y además incluye desnudos gratuitos que ni aportan a la historia, ni agregan comicidad. En general, es un filme del que uno sale con un sentimiento de pena ajena.
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