Monumentos que han sido destruidos en las películas
Nueva York suele ser el destino preferido de la catástrofe, pero existen incontables construcciones históricas que han sufrido en beneficio de las audiencias.
Un buen blockbuster suele involucrar elevadas dosis de acción y en muchas ocasiones, la espectacular destrucción de monumentos nacionales alrededor del mundo. Nueva York suele ser el destino preferido de la tragedia cinematográfica, pero existen incontables construcciones históricas que han sucumbido en beneficio de las audiencias. Les presentamos una lista con 10 monumentos que han sido destruidos en las películas.
Golden Gate (San Francisco, California)
Destruido en: X-Men: La batalla final (Brett Ratner, 2006)
Quizá La batalla final sea la película más floja en toda la franquicia mutante, pero ni siquiera esto pudo evitar que el proyecto dirigido por Brett Ratner nos deleitara con una de las mejores secuencias en nuestra historia: ¡la destrucción del Golden Gate! El momento llega cuando Magneto pretende invadir los laboratorios Worthington con sus infames armadas y, para lograrlo, las ubica en el emblemático puente, para luego arrancarlo y elevarlo hasta las instalaciones ubicadas en la isla de Alcatraz, en una espectacular muestra de poder del Amo del Magnetismo.
Nivel de destrucción: Bajo
Sabemos que la guerra contra el Fénix involucró muchas bajas militares y la destrucción absoluta de Alcatraz, pero al menos las consecuencias no fueron tan lamentables como muchos podrían imaginar. Después de todo, la liberación final de Magneto nos permite sospechar que las bajas civiles fueron nulas y que los más afectados por el desplazamiento fueron los turistas que no pudieron tomar su foto del recuerdo. A esto agreguemos que –técnicamente– el puente no fue destruido, sino arrancado de su base. Eso sí, les aseguramos que su reacomodo fue un verdadero dolor de cabeza para las autoridades estadounidenses…
Monte Rushmore (Keystone, Dakota del Sur)
Destruido en: Superman II (Richard Lester & Richard Donner, 1980)
Los especialistas aseguran que Superman es el máximo superhéroe en la historia del cómic, pero lamentablemente no podemos decir lo mismo de todos los kryptonianos. ¿O acaso ya olvidaron la invasión del General Zod en Superman II? Los alienígenas aprovecharon su superioridad numérica en el combate contra Kal-El, intimidaron al mundo con su temible poderío y finalmente sellaron su dominio al reemplazar los rostros del Monte Rushmore.
Nivel de destrucción: Bajo
Luego de ver el caos provocado por Zod en El Hombre de Acero, nos queda claro que los estragos al Monte Rushmore en Superman II no fueron tan graves. Lamentablemente la industria turística en Dakota del Sur no opinará lo mismo, pues suponemos que sus números de visitantes bajarán ante el inesperado retoque. Por otro lado, esperamos que el Monte Rushmore no sea el monumento favorito de Batman, ya que su destrucción podría generarle un nuevo odio contra los kryptonianos…
Letrero de Hollywood (Los Ángeles, California)
Destruido en: El día después de mañana (Roland Emmerich, 2004)
Quizás el letrero de Hollywood no tenga la espectacularidad de otros monumentos, pero se trata de un símbolo inconfundible para cualquier amante del celuloide. Es por ello que todos sufrimos cuando Roland Emmerich lo voló por los aires con un devastador tornado en El día después de mañana, en una de las secuencias más impresionantes en la vasta filmografía destructiva del realizador.
Nivel de destrucción: Medio
El letrero de Hollywood fue completamente borrado del mapa, pero nos queda la tranquilidad de que el punto turístico tiene acceso restringido al público, lo cual significó un mínimo de bajas durante su destrucción. Nuestra única petición: ¿y si las autoridades angelinas aprovechan el mantenimiento obligado para rescatar el viejo nombre original que llevaba: Hollywoodland? ¡Se vale soñar!
Casa Blanca (Washington, D.C.)
Destruida en: Olimpo bajo fuego (Antoine Fuqua, 2013)
La gran mayoría de los blockbusters suelen inclinarse por la destrucción neoyorquina, pero sólo los filmes que pretenden reflejar la máxima tragedia occidental se atreven a mostrar la caída de la Casa Blanca: ¡el máximo símbolo del poderío norteamericano! El inmueble ha sido destrozado por alienígenas, tomado por kryptonianos y sepultado por desastres naturales, pero su momento más doloroso del celuloide llegó con Olimpo bajo fuego. El filme dirigido por Antoine Fuqua muestra al presidente de los Estados Unidos secuestrado por un coordinado grupo terrorista, mientras que un atormentado guardaespaldas será la última esperanza para salvar al día.
Nivel de destrucción: Medio
Olimpo bajo fuego nos mostró una Casa Blanca gravemente afectada por todo tipo de ataques y aunque las embestidas continuaron en otros puntos de la ciudad, sospechamos que las bajas fueron reducidas en comparación con otras tragedias cinematográficas de mayor calibre. A pesar de ello, el filme sigue generando nerviosismo entre las audiencias norteamericanas, pues algunos sectores del público todavía se preguntan si un ataque bien coordinado sería capaz de tomar la residencia presidencial al más puro estilo de Hollywood. ¿Ustedes qué opinan?
Palacio de Westminster (Londres, Inglaterra)
Destruido en: V de Venganza (James McTeigue, 2005)
La destrucción cinematográfica de cualquier edificio gubernamental suele representar una enorme tragedia en cualquier historia, ¿pero cómo reaccionar cuando el inmueble simboliza la tiranía de las autoridades? El realizador James McTeigue –en colaboración con los Wachowski– ofreció la respuesta en su adaptación de V de Venganza, con el valeroso antihéroe detonando el Palacio de Westminster para derrocar al tiránico Canciller Adam Sutler.
Nivel de destrucción: Alto
Asumimos que la caída del inmueble no implicó muchas pérdidas civiles, pero marcó un enorme cambio social ante la caída de un sistema fallido que siempre se caracterizó por su crueldad. La secuencia también tuvo serias repercusiones entre las audiencias, pues algunos piensan que la película ubica el terrorismo como un recurso necesario en la búsqueda de justicia.
La estatua de la libertad (Nueva York, Nueva York)
Destruida en: Cloverfield (Matt Reeves, 2008)
¿De dónde salió Clover? Han pasado ocho años desde que JJ Abrams y Matt Reeves abrieron la interrogante, pero la respuesta definitiva todavía no ha llegado. De momento, sólo sabemos que la temible criatura surgió de aguas neoyorquinas para luego comenzar una impresionante ola de destrucción en la urbe de hierro.
Nivel de destrucción: Alto
Algunas películas esperan al momento climático para mostrar la destrucción de sus monumentos, pero Matt Reeves decidió que la Estatua de la Libertad debía ser decapitada desde los primeros minutos. ¿Cómo justificar esta decisión? La caída del máximo símbolo norteamericano marcaría la extinción de cualquier esperanza ante la inminente destrucción de la ciudad, ¿pues cómo frenar las embestidas de una criatura aparentemente indestructible?
Sobra recordar que la predicción inicial se cumplió con el desarrollo de nuestra historia, luego de que las autoridades deciden bombardear la ciudad como último recurso. ¿Pero funcionó el plan? La película original generó incontables debates al respecto, hasta que Avenida Cloverfield 10 nos demostró que los esfuerzos resultaron inútiles…
Basílica de San Pedro (Ciudad del Vaticano)
Destruido en: 2012 (Roland Emmerich, 2009)
Admítanlo: muchos pensaban que el año 2012 marcaría el fin del mundo ante las misteriosas profecías mayas. El nerviosismo incrementó todavía más con las aportaciones de Roland Emmerich, quien aprovechó su dominio del caos para mostrar los posibles cataclismos que aquejarían a la humanidad en el fatídico año. Y como toque final de desesperanza, el creativo derrumbó uno de los máximos símbolos religiosos alrededor del mundo: la Basílica de San Pedro.
Nivel de destrucción: Alto
Al igual que muchas otras películas de desastres, 2012 mostró una humanidad unida ante la tragedia. La gran diferencia es que ni el mismísimo Dios podría salvarnos de la aniquilación orquestada por Roland Emmerich, quien aniquila cualquier esperanza con un impresionante terremoto que no sólo destruye la Basílica de San Pedro, sino todo el Vaticano y los millones de feligreses en espera de un milagro.
Times Square (Nueva York, Nueva York)
Destruido en: Watchmen (Zach Snyder, 2009)
¿Cómo garantizar la paz en un mundo plagado de odio? Algunos se inclinarán por el diálogo y otros más por la guerra, pero sólo una mente maestra como Adrian Veidt –mejor conocido como Ozymandias– prefirió ir más allá para desarrollar el más drástico plan imaginable: emplear la energía del todopoderoso Dr. Manhattan para la construcción de un complejo mecanismo que destruya toda Nueva York, comenzando por su emblemática Times Square. ¿Qué querían, un calamar gigante?
Nivel de destrucción: Máximo
¿Sentimientos encontrados por este desenlace? No los culpamos, después de todo, Nueva York fue completamente aniquilada por los planes de Ozymandias, pero nos queda el consuelo de que el temor al Dr. Manhattan unificó a las máximas potencias mundiales y terminó con los horrores de la Guerra Fría. Lo más trágico es que el superhéroe ni siquiera participó en la destrucción, pero terminó por apoyar los planes al percatarse que era la única manera para alcanzar la paz.
París (Francia)
Destruido en: Armageddon (Michael Bay, 1998)
La gran mayoría de los cineastas disfrutan destruyendo uno que otro monumento en sus filmes, ¿pero por qué conformarse con un simple punto turístico cuando puedes destruir una ciudad completa cuya hermosura bien podría convertirla en un gigantesco museo? Tal fue el caso de Michael Bay, quien aprovechó los asteroides de Armageddon para la aniquilación absoluta de París. ¡Au revoir!
Nivel de destrucción: Máximo
Los amantes de París sufren al ver la caída de monumentos de jerarquía como Notre Dame, los Inválidos, el Arco del Triunfo y muy especialmente la Torre Eiffel. Sin embargo, el dramatismo va más allá del turismo, pues la secuencia culmina con una destrucción absoluta de la Ciudad de las Luces y la muerte de todos sus habitantes. Al menos Bruce Willis salvó el resto del mundo…
Capitolio (Washington, D.C.)
Destruido en: Día de la independencia (Roland Emmerich, 1996)
Quizá Día de la independencia no sea la mejor película de extraterrestres, pero definitivamente fue un parteaguas para las invasiones alienígenas del celuloide. Esto se debió a que Roland Emmerich mostró una humanidad sometida ante el poderío de los agresores y cuya ola de destrucción inició con la caída de las principales ciudades del mundo. Y para destrozar todavía más la moral de los sobrevivientes, ¡cada embestida arrancó con el estallido de los máximos monumentos de la humanidad! El punto elegido para Washington fue la Casa Blanca, pero el momento climático del ataque llegó con el Capitolio.
Nivel de destrucción: Máximo
La destrucción del Capitolio en Día de la independencia fue espectacular, pero el edificio histórico pasa a segundo término cuando recordamos que el ataque representó la muerte de millones de personas en Washington. La tragedia no terminó aquí, pues la invasión coordinada alrededor del mundo casi acaba con la humanidad en unas cuantas horas. El heroísmo de unas cuantas personas nos salvó en ese momento, ¿pero podemos superar una nueva invasión en Día de la Independencia: Contraataque?
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Luis Miguel Cruz Algún día me uniré a los X-Men, la Alianza Rebelde o la Guardia de la Noche. Orgulloso integrante de Cine PREMIERE desde el 2008.
