Agentes del desorden

Unos amigos, llegados ya a sus 30, descubren que su vida no es lo que desearon y deciden hacer lo más maduramente posible que se les ocurre: hacerse pasar por una pareja policíaca, con todo y patrulla. Y es así como pronto los problemas comienzan a surgir.

Agentes del desorden (Let’s Be Cops) fue duramente tratada en Estados Unidos, mas no así por el público, llevando una recaudación en taquilla de arriba los $80 millones de dólares y $44 mdd alrededor del  mundo, nada mal par una producción que no llegó ni a los $20 mdd de costo. Pero uno puede ver el principal problema con la película y la crítica del país del norte: se burlan de una de las instituciones más respetadas (el departamento de bomberos es la número 1) y hace parecer muy sencilla y poco trascendente la manera en que un par de civiles se hacen pasar pasar por agentes del orden. 

La química de los protagonistas (Jake Johnson y Damon Wayans Jr., quienes trabajaron juntos en la serie New Girl) es natural y nunca se siente forzada. El humor por ratos es predecible, mientras que en otras ocasiones algunos chistes son originales. El resto de los personajes sí están un tanto fuera de ritmo, con actuaciones acartonadas o poco creíbles, los malos son muy malos y malditos, mientras que los buenos son inocentes hasta el grado de lo ingenuo.

Hay un recurso que se está volviendo recurrente en las comedias de Estados Unidos: el uso de canciones populares de finales de los 90s o inicios del 2000. Ya lo hizo Comando especial con Eminem o la filmografía de Seth Rogen con Éste es el fin y los Backstreet Boys, más recientemente Una loca entrevista, donde “Firework” de Katy Perry tiene un papel importante. Pero Agentes del desorden no logra ejecutar el chiste por completo y se siente simplemente como un pretexto para arrancar risas.

Tenemos los arcos narrativos donde los personajes “crecen”, el nudo del 3er acto con todo y su secuencia de acción, y hasta personajes que sirven para aligerar la tensión (Keegan-Michael Key con un personaje y un acento muy gracioso); vamos, Agentes del desorden es una comedia que toma todos los elementos de la fórmula y los usa tan bien que no aporta nada extra, ni se arriesga a algo más. 

Probablemente la crítica en Estados Unidos fue muy severa con Agentes del desorden, sin duda no es lo peor que se haya estrenado en el 2014, sin embargo tampoco resulta un clásico que nos deja con las ganas de ver más aventuras del par de adultos que se hacen pasar por policías. 

¿Te interesa el mundo del emprendimiento?
Conoce Emprendedor.com el medio lider en contenido de Ideas de Negocio, Startups, Finanzas, Noticias para emprendedores, Franquicias, Marketing, Inspiración, síguenos y proyecta lo que eres.

Sergio López Aguirre Stanley Kubrick alguna vez dijo "Para tener una visión más amplia, no sólo vean cine bueno, también el malo" obvio le hice caso en lo segundo y es muy divertido.