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Cine

Una loca entrevista

05-02-2015, 10:35:56 AM Por:
Una loca entrevista

Después de la controversia, The Interview llega a las pantallas de cine. Y aunque este estreno de Seth Rogen y James Franco cumple, queda a deber.

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A estas alturas, es poco probable que haya gente que no sepa por lo menos la premisa básica, muy básica, de Una loca entrevista (The Interview): Seth Rogen y James Franco se burlan del presidente de Corea del Norte Kim Jong-Un. Pero yendo más a fondo, tenemos al dúo de periodistas Dave Skylark (Franco) y Aaron Rappaport (Rogen), quienes buscan hacer de su show de celebridades un programa más serio, al lograr que el líder coreano les concediera una entrevista… una «loca entrevista» (get it?).

James Franco y Seth Rogen ya habían probado su química en pantalla desde que estuvieron en la serie de culto Freaks & Geeks, pero en cine demostraron que eran una pareja sólida de comediantes al protagonizar Piña Express. Para Una loca entrevista la naturalidad es su mayor fuerte, las bromas, chistes y el timing de entrega es correcto y al punto. Por otro lado, la dirección tanto de Rogen como de Evan Goldberg es aún mucho más compleja –en términos de manejo de producción– que su anterior película, Éste es el fin

Sin embargo, Goldberg y Rogen crean un estilo que puede desgastarse muy rápido y que tiende a prestarse a la imitación: el uso de la cultura pop como vehículo de los chistes más fuertes de la trama. Es así que mientras en Éste es el fin teníamos a un gran sector de comediantes y cantantes del momento, desde Jason Segel, hasta Rhianna, pasando por Emma Watson; en Una loca entrevista aparece Eminem, mientras que “Fireworks” de Katy Perry es un elemento crucial para el desarrollo de la historia. 

Parte del encanto de la trama es el uso del bromance entre los protagonistas y la entrada de un tercero en discordia: Jong-Un, quien es interpretado de manera fresca y original por Randall Park, sin duda un gran acierto en el casting. Del resto del reparto, simplemente están ahí a la orden de la historia y los gags, sintiéndose desperdiciados elementos como Lizzy Caplan, por ejemplo. 

Aunque tampoco faltan las bromas escatológicas y uno que otro tinte homofóbico pero sin ninguna complejidad –independientemente del bromance ya mencionado–, estos chistes son tan simples, que parece que a Hollywood le gusta burlarse de las personas homosexuales sólo por el simple hecho de serlo… 

Como comedia, Una loca entrevista ofrece interesantes gags y momentos que provocarán risa en el espectador. Sin embargo, cuando nuestros futuros hijos o nietos nos pidan ver la película por la que casi entra en conflicto Estados Unidos y Corea del Norte, probablemente pasará lo siguiente: 

1) Tendremos que explicarles las referencias de la cultura popular que están usando para entender el chiste
2) Terminarán diciendo: “¿y por esto casi entramos a la Tercera Guerra Mundial?” Y nosotros les diremos: “Sí, sólo por esto…”. 

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autor Stanley Kubrick alguna vez dijo "Para tener una visión más amplia, no sólo vean cine bueno, también el malo" obvio le hice caso en lo segundo y es muy divertido.
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