Adam Sandler: ¿el mejor papel de su carrera?

Por Vera Anderson / Corresponsal Hollywood

Como comediante, Adam Sandler nos ha dado algunos de los personajes más divertidos en la historia de la gran pantalla. Pero de igual forma, nunca le ha dado miedo irse a lugares muy oscuros como actor, como le hizo en Embriagado de amor de Paul Thomas Anderson. Su más reciente filme, su primera colaboración con su amigo de muchos años, Judd Apatow, es Siempre hay tiempo para reír (Funny People), una oscura e incisiva mirada a un hombre de chistes, de adentro hacia afuera.

¿Cómo se sintió regresar al mundo del stand-up?
Hacer el puro stand-up me regresó a los viejos tiempos. Sabes, hablo como si llevara muchísimo tiempo haciendo esto. Apenas tengo 42, pero he estado haciéndolo desde los 17, así que tengo muchos recuerdos en la comedia. Me regresó al tiempo en que me estaba costando mucho trabajo y en lo único que pensaba era en tener una oportunidad. Eso era lo único en aquel entonces. Desafortunadamente, desearía no ser tan loco como lo soy, pero estaba tan determinado que la mayoría de mis pensamientos eran sobre eso, era muy egoísta. Sólo pensaba en mis propias cosas. Así que cuando hice el stand-up ahora, si me salía un buen set o algo, no me sentía igual que en aquel entonces. Antes pensaba, "Ah, eso se sintió bien y eso me va a llevar a donde quiero llegar". Ahora sólo sentí bien de obtener risas, ahora no me muero tanto por eso como antes. No lo necesito tanto. Me emocionaba más regresar a casa con mis hijos, así que sí fue un poco extraño en ese sentido. Creo que hacer películas es más mi pasión ahora.

¿Cuál es la historia detrás de aquellas imágenes viejas en la secuencia de créditos iniciales, de ti haciendo una llamada de broma?
Eso fue aburrimiento –ríe–. Aburrición juvenil. En lo que único que pensaba en esa época era en la comedia, y esas llamadas eran mi forma de intentar hacer a reír a alguien, aunque fuera a mí mismo. Y ahora que estábamos haciendo la película, Apatow me decía, "Oye, ¿podemos conseguir algún pietaje de ti de chico?". Pero mi mamá no sabía dónde estaban las películas viejas de 8mm que filmaba mi papá, así que tuvimos que recurrir a cosas que tenían mis antiguos roommates, como lo que grabó Apatow de esas llamadas. No sabía que usaríamos eso en una película un día, me hubiera presentado a mí mismo un poco diferente. Era un idiota presumido.

Así que todo se trataba de hacer reír a la gente, nunca fue como que te escondiste en la comedia para ocultar una vida interior o un sentido de inferioridad…
Cuando empecé, probablemente mucho más que ahora. Creo que no sabía quién era yo, ni arriba ni abajo del escenario. Me tomó rato darme cuenta de eso. Estoy seguro que allá arriba yo quería ser alguien que deseaba ser abajo. Supongo que ahora cuando me subo para un show de una hora, estoy en mejor humor que en el resto de las 23 horas del día. No puedo decir que siempre soy tan buena onda como ese tipo de arriba. Pero no sé. Conozco gente que son 100% diferentes abajo del escenario que sobre él. Algunos lo usan como escape, para sacar todas las cosas negativas. Los tipos que son increíblemente groseros arriba y en la vida real son los más dulces. Tal vez esa es su forma de sacarlo todo.

Regresemos a la parte en que tú y Judd fueron roommates hace tiempo, y aún así les tomó muchos años trabajar juntos…
Creo que cada uno siempre ha tenido su propio estilo de comedia. Judd es muy bueno para adaptarse al estilo de quien sea, y ha escrito para muchos comediantes de todo tipo. Cuando escribía para mí, intentaba pensar como yo. Siempre hemos hablado de hacer una película juntos, pero su carrera iba hacia un lado y la mía por otro, pero a cada rato decíamos: "¡Tenemos que hacer una!". Cuando yo estaba haciendo Los declaro marido y Larry, él llegó con un DVD de Ligeramente embarazada antes de que saliera y me dijo que la viera. Y me encantó, sabía lo personal que era y lo divertida y emocional. Y le dije: "Apatow, eso fue increíble. Tenemos que ver cuándo hacemos la nuestra". Y me dice, "Sí, creo que ya tengo algo". Y eso pasó. 

¿Crees que naciste siendo chistoso?

No sé si nací así, pero sí nací intentando serlo. Siempre me emocionaba hacer a otra gente reír, y cuando funcionaba, me ponía como loco. Si hacía reír a mi papá, yo era feliz. Si hacía reír a sus amigos, era lo mejor del mundo. Eso fue lo único que realmente me importaba, hacer a otros reír.

Video de cuando Sandler y Judd eran roommates.

¿Quieres ser un emprendedor o emprendedora?
Conoce Emprendedor.com el mejor contenido de Ideas de Negocio, Startups, Franquicias, e Inspiración, síguenos y proyecta lo que eres.

César Albarrán Torres Es investigador del Programa de Culturas Digitales de la Universidad de Sydney. Es el editor fundador de cinepremiere.com.mx y escribe sobre cine, televisión y tecnología en diversos medios nacionales e internacionales.