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¿Cuál es el mejor año en la historia del cine?

17-05-2021, 3:48:17 PM Por:
¿Cuál es el mejor año en la historia del cine?

De los grandes clásicos al cine contemporáneo, un recorrido por los años más gloriosos del celuloide.

Cada año en la historia del cine incluye títulos que han conquistado al público y la crítica, ya sea por las reflexiones brindadas o las emociones generadas. Sin embargo, existen algunos años de auténtico ensueño, surgidos del talento conjunto de algunos de los grandes cineastas y actores de todos los tiempos y sus necesidades creativas en ciertos contextos sociopolíticos concretos. Como es difícil elegir un solo mejor año en el cine, te dejamos una lista con los mejores años para el cine. Desde la era dorada de Hollywood hasta el siglo XXI.  

2007

Mejor año en el cine

El primer gran año cinematográfico del siglo XXI que, apoyado en el desencanto suscitado tras la Guerra contra el terror, resultó en profundas reflexiones alrededor del mundo. Hollywood vivió un trágico retorno al western con títulos que cuestionaban sus bases contemporáneas con Sin lugar para los débiles, así como sus mitos fundacionales con Petróleo sangriento y El asesinato de Jesse James por el cobarde Robert Ford. El desencanto fue palpable en cintas de otros géneros como Zodiaco, Michael Clayton, Camino salvaje, Desapareció una noche, Promesas peligrosas, La niebla, Soy leyenda, Sweeny Todd y Trick r’ Treat, todas caracterizadas por la oscuridad y la pérdida de la inocencia ante un mundo que ha desaparecido para siempre. Incluso Juno, desde una perspectiva más optimista, hizo lo propio a partir de una joven que debe dar el paso a la vida adulta mucho antes de lo que había contemplado.

La tendencia se extendió por diversas latitudes con Expiación, deseo y pecado (Reino Unido), Persépolis (Francia), 12 (Rusia) y La antena (Argentina), por nombrar algunas. México no estuvo exento con El búfalo de la noche y Párpados azules que abordan las tragedias personales de una sociedad sumida en la desesperanza. Las mayores alegrías llegaron de Ratatouille y Encantada, dos historias improbables de una rata que anhela cocinar y una princesa perdida en el mundo real, que demostraron la importancia de seguir soñando sin importar lo oscuro que luzca el panorama.

1982

Mejor año en el cine

Suele ser catalogado como el año más glorioso de la ciencia ficción cinematográfica. Una etiqueta perfecta cuando recordamos los estrenos de títulos como E.T., Blade Runner, La cosa del otro mundo, Viaje a las estrellas II: La ira de Khan y Tron. Todos ellos aprovecharon las propiedades del género para plasmar diversas inquietudes sociopolíticas de la época. Y en algunos casos, para abordar distintos miedos tecnológicos ante los avances de disciplinas como la programación y la robótica. Todos estos títulos alcanzaron el estatus de clásicos y muchos de ellos siguen creciendo con franquicias que gozan de gran popularidad hasta nuestros días.

Las glorias de 1982 no se limitan a un solo género. Pues el drama sobresalió con títulos como Gandhi, La decisión de Sophie y El rey de la comedia; que abordaron crisis sociales de distintas épocas y brindaron algunas de las mejores interpretaciones en las carreras de Ben Kingsley, Meryl Streep y Robert DeNiro; la comedia atravesó un éxito similar con Picardías estudiantiles y muy especialmente Tootsie encabezada por un Dustin Hoffman memorable. Mientras que el terror y la fantasía también alcanzaron puntos altos con Poltergeist. Que convirtió la televisión en un símbolo de la abducción, así como con las menos profundas Conan el bárbaro y El cristal encantado. Eso sí, el año también se caracterizó por el auge de las secuelas con siete continuaciones en el top 50 de taquilla mundial.

1960

Mejor año en el cine

El año de 1960 no se caracterizó por la presencia de un elemento narrativo o simbólico en común. Aun así figura entre los años más gloriosos del celuloide al representar la cumbre de algunos de los grandes realizadores de todos los tiempos. Tradicionalmente es recordado por el estreno de Psicosis, que afianzó a Alfred Hitchcock como el amo y señor del suspenso. Con una de las historias más fascinantes de todos los tiempos, engalanada por un impactante giro y una impresionante campaña con la que sólo elevó más las expectativas.

Pero también fue el año de La dolce vita. Que suele disputarse la primera posición en la obra de Federico Fellini con 8 ½, Sin aliento, que inició la brillante trayectoria de Jean-Luc Godard. Los siete magníficos con los que John Sturges rescató los viejos valores de un oeste decadente y El apartamento que representó uno de los puntos más altos de la comedia al desafiar los estrictos códigos morales de la época. Lo que le convirtió en el filme más celebrado de Billy Wilder junto con El ocaso de una vida (1950). Un año de tanto talento creativo, que incluso realizadores como Stanley Kubrick y Elia Kazan brillaron enormemente con títulos como Espartaco y Río salvaje. Los cuales gozaron de un gran éxito entre las audiencias a pesar de lo alejadas que estaban de sus respectivas obras maestras.

1977

Mejor año en el cine

Puede que 1982 sea el año más glorioso para la ciencia ficción. Pero sólo pudo ser posible gracias a un 1977 determinante para el género con Encuentros cercanos del tercer tipo y Star Wars. La primera olvidó al extraterrestre invasor suscitado con la Guerra Fría y lo mostró como un visitante amistoso que llega con la finalidad de aportar grandeza a la especie. Lo que a la larga sería clave para ET y muchos otros filmes posteriores. La segunda hizo historia al convertirse en el mayor fenómeno cinematográfico de todos los tiempos. Que revolucionó el género desde la ópera espacial. El reino del blockbuster con el máximo aprovechamiento del monomito, así como el modelo cinematográfico con la consolidación de las grandes franquicias y el surgimiento de auténticas bases de aficionados.

Películas fascinantes que perseguían la esperanza e incluso el escapismo a dos años de Vietnam. Una tendencia palpable en otros éxitos del año como Fiebre de sábado por la noche, Bernardo y Bianca, Mi amigo el dragón y La espía que me amó. Esto no evitó que la desesperanza y la tragedia se manifestaran de lleno en el terror. Como con la reflexiva El exorcista II, la perturbadora Eraserhead y la brutal La colina del terror. Mención aparte para Suspiria, que rescató antiguos horrores del viejo continente al tiempo que consolidó a Dario Argento como el nuevo maestro del giallo.

Un año dominado por emociones diametralmente opuestas y cuya gran coronación llegó con Annie Hall, una de las cintas más emblemáticas de Woody Allen. Y uno de los puntos más altos de la comedia al fusionar el romance con toda clase de ironías y reflexiones que capturan el sentir de una sociedad. Que es cada vez más compleja en todos los sentidos.

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1999

Mejor año en el cine

El salto al siglo XXI hizo que el cine considerara a 1999 como un año de transición y experimentación en busca de un renacimiento simbólico dentro de distintos ámbitos. Como prueba, algunas de las películas más exitosas, como es el caso de Matrix. Que trasladó los peores miedos tecnológicos al campo de la simulación y plasmó una serie de cuestionamientos sobre el despertar humano en una cinta de acción; El club de la pelea que perseguía la destrucción de un sistema fallido en busca de un reinicio social y económico; Belleza americana, ganadora del Oscar a Mejor película, que demostró que nunca es tarde para retomar la persecución de los antiguos sueños; incluso La ley de Herodes que abordó la necesidad de un cambio político en nuestro país y la imposibilidad para alcanzarlo por una corrupción firmemente arraigada en la sociedad.

Esta misma tendencia resultó en el ascenso de algunos de los cineastas más emblemáticos de los últimos tiempos como Sofía Coppola con Las vírgenes suicidas, Paul Thomas Anderson con Magnolia, Spike Jonze con ¿Quieres ser John Malkovich?, M. Night Shyamalan con El sexto sentido por nombrar algunos e incluso Pedro Almodóvar que alcanzó la consolidación a escala global con Todo sobre mi madre. Fue un año revolucionario para el terror con El proyecto de la Bruja de Blair; refrescante para la comedia adolescente con American Pie y 10 cosas que odio de ti; y renovador para el cine mexicano con Sexo, pudor y lágrimas. También fue el año que prácticamente despidió a la animación tradicional por todo lo alto con El gigante de hierro. Y que a su vez marcó el adiós de un grande como Stanley Kubrick con Ojos bien cerrados.

Finalmente, representó el retorno de Star Wars con La amenaza fantasma. La cual demostró su capacidad para seguir conquistando aficionados de una nueva generación con la trágica, pero fascinante historia de origen de Anakin Skywalker / Darth Vader.

1941

Mejor año en el cine

Los horrores provocados por la II Guerra Mundial hicieron que las audiencias recurrieran al cine en busca de un poco de pureza. Lo que puede palparse en Ciudadano Kane y Qué verde era mi valle. consideradas entre las mejores películas de todos los tiempos. La primera aborda la historia de un magnate de la información que rememora su último momento de verdadera felicidad con la palabra Rosebud; la segunda es un nostálgico recorrido por un pueblo galés a través de los ojos de un hombre que abandonó su hogar de niño en busca de una vida mejor.

Esto no impidió que la industria explorara el lado más oscuro del ser humano con El halcón maltés, que es considerada como la primera gran exponente del cine negro; El hombre lobo cuyo monstruo es visto como un símbolo de la brutalidad que aqueja al mundo en esa misma época; Sospecha, sobre los miedos de una joven heredera convencida de que su esposo planea asesinarla; o El hombre y la bestia que explora la dualidad humana a través del mítico Dr. Jekyll y el temible Sr. Hyde.

No menos trascendente fue que El sargento York, sobre un héroe de la Gran Guerra, fuera la película más taquillera del año por su alta carga patriótica en tiempos de crisis. Mientras que Dumbo se posicionó como uno de los títulos más rentables de Walt Disney. Esto gracias a la inocencia y escapismo que brindó a un público saturado de preocupaciones.

1962

Mejor año en el cine

El año de 1962 fue sumamente peculiar por los cambios en los modelos de realización cinematográfica con Lawrence de Arabia. Cuyo Oscar a Mejor película y liderazgo en taquilla representarían el adiós perfecto de la vieja épica que se tornaría insostenible al año siguiente con Cleopatra (1963).

La revolución también se manifestó en el nacimiento de las grandes franquicias con El satánico Dr. No, que marcaría el debut fílmico de James Bond. Más destacado aún es que las preocupaciones sociales hicieron que los distintos creativos voltearan al pasado para cuestionar el futuro de la unión americana y el resto del mundo. Lo que resulta evidente en Un tiro en la noche. Que es considerado como el western crepuscular por excelencia al plasmar la debacle del oeste salvaje ante el naciente estado de derecho; El embajador del miedo que abordó las peores teorías de conspiración ante un sistema político cada vez más fallido; o El día más largo que rememoró las hazañas del Desembarco de Normandía.

No menos significativas fueron Lolita, que plasmó la abrupta madurez de una juventud perdida; y Matar a un ruiseñor, que mostró un país sumido en graves problemas raciales y que convertiría al noble Atticus Finch en uno de los personajes más celebrados del celuloide. El legado de estas dos cintas continuaría brillantemente en años posteriores, destacando el año de 1967 con El graduado, ¿Sabes quién viene a cenar? y Al calor de la noche.

1994

Mejor año en el cine

Si hay un año que ha sido decisivo para el cine contemporáneo es 1994. Suele ser recordado por la dura competencia suscitada en la carrera por el Oscar a Mejor película. Con cuatro títulos que fueron determinantes para forjar la industria que conocemos hoy en día: Cuatro bodas y un funeral, que impulsó la comedia romántica y convirtió a Hugh Grant en un referente masculino del género; Sueño de fuga que abordó la hermandad para ascender como una pionera de las guy cry movies; Tiempos violentos que cimentó la exitosa carrera de Quentin Tarantino; y Forrest Gump que consolidó el éxito de Tom Hanks al tiempo que arrojaba un grito de esperanza para el sueño americano.

La brillantez del año cinematográfico no se quedó aquí, con El rey león tocando uno de los puntos más altos de la llamada Era del Renacimiento de Disney; Clerks que impulsó la trayectoria de Kevin Smith y el auge del cine indie; o Asesinos por naturaleza que capturó una América cada vez más decadente. En el terreno histriónico sobresalieron El profesional, que marcó el debut de Natalie Portman; Máxima velocidad que impulsó a Keanu Reeves y Sandra Bullock a lo más alto; y La máscara que potenció el talento cómico de Jim Carrey. Mención aparte para Leyendas de pasión y Entrevista con el vampiro. Que catapultaron a Brad Pitt, destacando que esta última fue un glorioso despertar para los revinientes del celuloide. Y finalmente, Mentiras Verdaderas, que afianzó a James Cameron como un maestro del cine espectáculo, impulsándolo así a la proeza de Titanic (1997).

1976

Mejor año en el cine

El año de 1976 fue dominado por Rocky, claro ganador de la taquilla mundial y de la temporada de premios al ser condecorado con el Oscar a Mejor película. Y cuyo legado continúa hasta la actualidad con una transición a la franquicia Creed. Ni su gran éxito pudo impedir la popularización de títulos que reflejaban el desencanto norteamericano ante las distintas esferas de poder frente a la terminada Guerra de Vietnam. Siendo Taxi Driver la punta de lanza con la historia de un veterano inestable ansioso por hacer justicia en una urbe de hierro dominada por el sexo y la violencia, y que representó una de las colaboraciones más celebradas entre Martin Scorsese y Robert DeNiro.

Le sigue de cerca Todos los hombres del presidente, la película periodística por excelencia al abordar la importancia noticiosa en Watergate que desembocó en la renuncia de Richard Nixon. No menos memorable fue lo hecho por Sidney Lumet en Poder que mata. Sobre el accionar al interior de una cadena televisiva que aprovecha la crisis mediática y la telebasura para disparar sus ganancias. Mención aparte para La profecía y Carrie, que usan el terror para reflejar la debacle de la política norteamericana, pero también de sus juventudes. Una lista larga que se extiende con muchos títulos más, demostrando así el poder del celuloide en una época de grandes inquietudes.

1939

Mejor año en el cine

El año de 1994 fue determinante para la industria contemporánea, pero el de 1939 fue decisivo para toda la historia del cine. Al cimentar las bases hollywoodenses con la consolidación de los principales estudios que dieron solidez al sistema y garantizaron el estreno de películas cada vez más ambiciosas. Un año glorioso que suele ser recordado por las titánicas Lo que el viento se llevó, El mago de Oz y La diligencia. Estas suelen encabezar las listas de mejores películas de todos los tiempos. Gracias a sus valores técnicos y narrativos, pero también por las distintas formas de capturar a la unión americana en el año que marcó el inicio de la II Guerra Mundial.

La grandeza no termina con esta tercia, sino que continúa con títulos de enorme valía como Amarga Victoria, Caballero sin espada, Cumbres borrascosas, Ninotchka, Adiós Mr. Chips y Mujeres, entre muchos otros. Esta calidad se refleja en el ascenso conjunto de estrellas que abrieron el camino de la llamada Edad de Oro. Como Vivien Leigh, Clark Gable, John Wayne, Judy Garland, Bette Davis, James Stewart, Joan Crawford, Laurence Olivier y Cary Grant por nombrar algunos. Así como a la brillante labor de algunos de los grandes realizadores de todos los tiempos cuya visión sigue ejerciendo influencia hasta nuestros días. Como fue el caso de Victor Fleming, John Ford, Frank Capra, William Wyler, Howard Hawks y Alfred Hitchcock. El mejor año en la historia del cine y que difícilmente será superado algún día.

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autor Algún día me uniré a los X-Men, la Alianza Rebelde o la Guardia de la Noche. Orgulloso integrante de Cine PREMIERE desde el 2008.
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