Domingueando

El domingo comenzó con cine mexicano: Otro tipo de música, dirigida por José Gutierrez Razura. De entrada, cabe resaltar la labor musical dentro de este filme. Las piezas que se muestran (incluído el score) se nota que fueron cuidadosamente escogidas y colocadas para hilarse exitosamente con la historia de estos personajes cuya vida está íntimamente unida a la música. Desafortunadamente, ese cuidadoso análisis no se extendió al guión de la cinta. La trama de por sí es floja: sigue a dos parejas, un joven que conoce a una chica en un café y se embarca con ella en un viaje en autobús, y a los vecinos de él, un escritor que investiga la vida de una poco conocida cantante y su pareja amorosa, aunque ella evidentemente está harta de sentirse ignorada por él. Pero cuando digo que el problema reside en el guión, no me refiero a que su principal problema sea la trama, es floja, sí, pero eso lo aguantaríamos… si los diálogos no fueran tan acartonados y falsos. Tanto, que distraen. Y son cosas pequeñas, pero a mi parecer importantes, como la diferencia entre que una persona normalmente le diga a su novia: "Ahorita vengo, voy al super" y no: "Regreso en un momento. Tengo que ir al supermercado". Desafortunadamente, el medio escrito no es el óptimo para describir esta falla. Pero seguro se lo imaginan. Lo hemos visto y escuchado muchas veces.

Después vino una decisión importante. Tuve que escoger entre una proyección de la cinta de Guatemala Gasolina y la venezolana El enemigo. Al final, me decidí por ésta última. Y estoy contento con mi decisión. Se trata de una historia sobre una madre que lleva a su hijo de 17 años al hospital cuando él llega a casa con tres disparos en el cuerpo. El joven pierde el conocimiento y es evidente que si no recibe atención inmediata en cualquier momento morirá. En el hospital, mientras espera noticias de los doctores, la madre se encuentra con un fiscal de distrito (que "no es como en la tele. No en este país.") que la empieza a cuestionar. Resulta que su hijo está involucrado con pandillas y que no es el hijo bueno que la mamá se ha logrado convencer que es. Se trata de una cinta muy bien armada, con un guión y actuaciones sólidas que podría sorprender a la hora de los premios en este festival. Es el tipo de película que uno quisiera pudiera llegar a más público del que desafortunadamente (probablemente) llegará. Pero si acaso la encuentran por la Cineteca (o están aquí en Guadalajara) un día de estos, no duden en entrar.

Por último, el nuevo documental que Juan Carlos Rulfo dirigió junto a Carlos Hagerman: Los que se quedan. ¿Se acuerdan ayer que les dije que si planeaban hacer un documental sobre un tema "tan gastado como este tienen que encontrarle un águlo nuevo y de verdad meterse al mundo"? Pues aquí está la prueba de que sí se puede. Porque Los que se quedan entiende muy bien que lo que hace interesante y atractiva a una historia es la gente que la protagoniza. Los datos duros son sólo números, fechas, estadísticas… y sin rostro, no significan nada. Podemos leer que tal número de familias se quedan en México mientras sus familiares intentan cruzar a Estados Unidos. Pero, ¿eso qué? Sólo podemos realmente entender lo que significa si entramos a la casa de esta gente. Y no sólo con una entrevista de cinco minutos en lo que nos vamos al siguiente pueblo. Sino quedándonos ahí, conociéndolos y escuchando sus historias. Rulfo y Hagerman lograron un documental que lo mismo te hace doblar de risa, que llegar casi a las lágrimas. Al igual que con En el hoyo (aunque confieso que esa me gustó mucho más), encontró personajes originales, carismáticos y entrañables que en ningún momento se martirizan como "víctimas de la circunstancia" o el clásico y espantoso cliché de "así nos tocó vivir". No se la pierdan.

Les dejo un cachito de la sesión y preguntas y respuestas que sostuvieron los realizadores con el público terminada la proyección.

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Staff Cine PREMIERE Este texto fue ideado, creado y desarrollado al mismo tiempo por un equipo de expertos trabajando en armonía. Todos juntos. Una letra cada uno.