Frances McDormand: Sus mejores películas y series

Es un hecho innegable que Frances McDormand no sólo es una de las mejores actrices de su generación, sino que pertenece a la élite de la actuación contemporánea. Forma parte del selecto grupo de actores galardonados con dos Premios de la Academia y al aún más exclusivo grupo integrado por aquellos ganadores de la llamada Triple Corona interpretativa que consiste en el Óscar, el Emmy y el Tony.  No menos importante es que su presencia se ha convertido en un sinónimo de calidad entre el público y la crítica.

Del thriller al western y pasando por el dramedy, un recuento de las mejores películas y series de Frances McDormand.

Loco fin de semana (Dir. Curtis Hanson, 2000)

El 2000 fue un año de ensueño para Frances McDormand, quien cosechó numerosos elogios y reconocimientos con Casi famosos, pero también con la menos popular Wonder Boys. La historia se centra en un profesor de escritura creativa que batalla por terminar su segunda novela y cuya desenfrenada vida incluye múltiples divorcios, un amorío con la rectora de la universidad en la que trabaja, esposa de su jefe de departamento y quien espera un hijo suyo. Podría pasar por una comedia de enredos, pero la presencia estelar de Michael Douglas y McDormand es determinante para la construcción de un dramedy complementado con elementos de un coming-of-age, que en este caso resulta tardío por la inmadurez propia del personaje central que batalla por definir su situación. El trabajo de la actriz no fue galardonado por los grandes certámenes, pero sí por los diversos círculos de la crítica en los Estados Unidos.

Olive Kitteridge (Dir. Lisa Cholodenko, 2014)

Puede que Frances McDormand sea reconocida por su trayectoria cinematográfica, pero esto no le ha impedido incursionar en la televisión de manera ocasional. La más destacada de todas es Olive Kitteridge, miniserie de HBO que inspirada en la novela homónima ganadora del Pulitzer escrita por Elizabeth Strout, relata 25 años de vivencias de una profesora retirada, que van de sus relaciones familiares a las fricciones con otros habitantes de su pueblo. Mucho se ha especulado sobre si la actriz se apoyó en este trabajo para la posterior Tres anuncios por un crimen, cuando lo cierto es que más allá de la dureza mostrada por sus respectivas personalidades, ambas féminas tienen bases y aspiraciones considerablemente distintas que las hace únicas en su ramo. Su participación le valió el Emmy a Mejor actriz y la nominación al Globo de oro en la misma categoría.

Quémese después de leerse (Dir. Ethan & Joel Coen, 2008)

Era fácil pensar que el éxito de Marge Gunderson en Fargo resultaría en personajes similares para Frances McDormand en sus siguientes colaboraciones con los Coen. Sin embargo, el talento de la tercia evitó que la premisa se cumpliera, siendo Quémese después de leerse el mejor ejemplo. La actriz da vida a Linda Litzke, empleada de un modesto gimnasio que pretende aprovechar un disco compacto con presunta información sensible para hacerse con una fuerte suma de dinero que le permita costear una cirugía plástica. Una mujer banal cuya ambición funge como el detonante de las acciones, mientras que su bajo nivel intelectual resulta en un plan tan absurdo como imposible que desatan una serie de enredos propios de una de las mejores comedias negras de su tiempo. Su labor le valió ser nominada a Mejor actriz de comedia o musical en los Globos de oro, pero no fue suficiente para competir por el Oscar.

Tierra fría (Dir. Niki Caro, 2005)

En mayor o menor medida, Frances McDormand siempre ha aprovechado su talento para capturar las complicaciones de ser mujer en un mundo regido por los hombres. Tierra fría es uno de los mayores exponentes de esta tendencia al apoyarse en la ficción para abordar el primer caso judicial de acoso sexual en los Estados Unidos en donde la parte afectada resultó ganadora, una minera que emprendió un largo recorrido legal en busca de protección de las autoridades. La cinta es protagonizada por una estupenda Charlize Theron, pero su labor se ve complementada por la no menos brillante Frances McDormand como otra minera, pero sobre todo una vieja amiga que se convierte en un importante apoyo para el personaje estelar en los tiempos de mayor adversidad. Ambas actrices compitieron por el Premio de la Academia, siendo la cuarta nominación para McDormand.

Simplemente sangre (Dir. Ethan & Joel Coen, 1984)

Un título que bien merece ser considerado historia del cine: ópera prima de los Coen, debut de Frances McDormand, así como de la primera colaboración entre ambas partes. Además de la fructífera alianza, la historia de un hombre que contrata a un investigador para que asesine a su esposa infiel sentó las bases de muchos elementos icónicos en la obra de la dupla realizadora, como es el caso de los crímenes que terminan retorciéndose para dar giros completamente inesperados. McDormand jugó un rol decisivo en el éxito del proyecto con su interpretación de Abby, una fémina en cuestión cuya personalidad le impide ser una auténtica víctima a pesar de la peligrosidad de la situación que enfrenta. Una característica que se tornaría representativa para la construcción de su posterior filmografía. La película también fue decisiva a nivel personal de los involucrados, pues no pasó mucho tiempo para que la actriz contrajera nupcias con Joel.

Casi famosos (Dir. Cameron Crowe, 2000)

Tal vez Penny Lane sea el personaje femenino por excelencia de Casi famosos, pero esto no minimiza la relevancia de Elaine Miller en el celebrado coming-of-age de Cameron Crowe. El personaje representa un contrapeso importante en la desenfrenada aventura periodística de su hijo William, pero el talento y carisma de Frances McDormand son determinantes para evitar que las preocupaciones maternales se conviertan en una eterna lucha por el control de la juventud. En lugar de esto, la actriz brinda una interpretación enternecedora aun cuando deambula muy cerca de la comedia. Esto con recomendaciones antidrogas y momentos de ira contenida con el fin de evitar la ridiculización de su muchacho. Representó su tercera nominación al Oscar, esta vez en la categoría de Mejor actriz de reparto. Se especula que no pudo alzarse con la victoria porque dividió votos con su compañera Kate Hudson y porque algunos académicos consideraron que debió ser considerada por Loco fin de semana (2000).

Tres anuncios por un crimen (Dir. Martin McDonagh, 2017)

Frances McDormand ha realizado numerosas exploraciones a los rincones más recónditos de los Estados Unidos, siendo Tres anuncios por un crimen una de las más destacadas, pero también una de las más sombrías. La historia de una madre que, desesperada por la inoperancia de la policía local para resolver el asesinato de su hija adolescente, alquila tres anuncios espectaculares con los que busca poner presión sobre las autoridades. Uno de los puntos más altos en la carrera de la actriz, pero también uno de los más arriesgados, con una interpretación tan fría como hostil y que nunca se gana la simpatía absoluta del público. Esto hace que su labor sea más memorable aún, pues se trata de un personaje que no busca la compasión, sino que exige resultados en un mundo que luce cada vez más indiferente al dolor ajeno. Una interpretación de primer nivel que le valió el segundo Oscar de su carrera y que la convirtió en la rival a vencer de la correspondiente temporada de premios.

Nomadland (Dir. Chloé Zhao)

Chloé Zhao siempre ha externado un enorme interés en el oeste norteamericano. La tendencia se repite con Nomadland, considerada por la crítica como su gran consolidación realizadora, donde se ve apoyada de forma significativa por la presencia estelar de Frances McDormand. La actriz da vida a una mujer que lo ha perdido todo en la Gran Recesión, lo que la inspira a emprender un viaje en caravana por la región occidental de su país en busca de paz y autorreconocimiento. Un neowestern que, a diferencia de muchas otras exploraciones de la vieja frontera estadounidense, no se conforma con plasmar la debacle de la unión americana, sino que también presenta una visión esperanzadora del porvenir a partir de la búsqueda de identidad individual y nacional, esta última capturada en la región simbólica por excelencia del cine norteamericano. Su paso por la inusual temporada de premios 2020/21 fue sumamente exitoso y cerró con broche de oro al llevarse tres Premios de la Academia: Mejor película, directora y actriz.

Mississippi en llamas (Dir. Alan Parker, 1988)

Una de las películas más ambiciosas de su tiempo, así como una de las más polémicas. Su trama se inspira en un triple homicidio relacionado con el Ku Klux Klan que gozaba de una enorme popularidad en la región, pero muchos de los sucesos reales fueron alterados en beneficio de la historia. Esto último no fue bien visto por muchos, pero no le impidió cosechar siete nominaciones al Oscar, incluyendo la primera para Frances McDormand como Mejor actriz de reparto. La fémina brinda una estupenda interpretación como la esposa de un sospechoso y que trata de ser conquistada por un agente con la esperanza de descubrir algún fallo en la coartada. Pudo ser superficial con otra actriz, pero no con McDormand, quien construyó a una mujer que debe decidirse entre las presiones sociales que prácticamente la obligan a obedecer ciegamente a su marido o sus principios que la invitan a hacer lo correcto. La película que impulsó su carrera de forma decisiva.

Fargo: Secuestro voluntario (Dir. Ethan & Joel Coen, 1996)

Suele ser recordada como la gran consolidación de los hermanos Coen, pero también marcó un punto decisivo en la carrera de Frances McDormand en el rol de Marge Gunderson. Se trata de la jefa policial del modesto pueblo titular, cuyos siete meses de embarazo no le impiden profundizar en la resolución de un curioso caso. Detalles que parecen mínimos, pero que aunados a la estupenda interpretación de la actriz, fueron fundamentales para que un papel aparentemente sencillo se viera enaltecido en sus bases simbólicas: una madre cuya pureza innata la torna incorruptible en un mundo decadente y cuyas crecientes tensiones laborales no le impiden actuar de una manera enternecedora con su círculo más cercano. Una combinación inusual que resultó tanto en una de las grandes comedias como en uno de los mejores personajes femeninos de finales de siglo XX y que fue merecidamente galardonado con el Oscar a Mejor actriz para McDormand, el primero en toda su carrera.

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Luis Miguel Cruz Algún día me uniré a los X-Men, la Alianza Rebelde o la Guardia de la Noche. Orgulloso integrante de Cine PREMIERE desde el 2008.