Buscador
Ver el sitio sin publicidad Suscríbete a la revista
Cine

La hora de tu muerte – Crítica

31-01-2020, 4:36:16 PM Por:
La hora de tu muerte – Crítica

La hora de tu muerte en sí misma es una sentencia para quien quiera verla como algo más que un paliativo para matar un profundo aburrimiento.

Cine PREMIERE: 2
Usuarios: 3.5
Votar ahora:

Con una nimia inspiración en Black Mirror y las cada vez más frecuentes historias de terror emanadas de las redes sociales y el mundo tecnológico, La hora de tu muerte introduce una app mortífera y generadora de profundos lamentos y huidas. ¿Si hubiera una aplicación capaz de predecir la hora de tu muerte, la descargarías? 

Los protagonistas de esta historia dirigida por Justin Dec sí lo hacen, víctimas del morbo, la presión social y la inocencia propia de alguien ignorante de peligros inimaginables a su alrededor, aún más cuando están concentrados en algo tan “inofensivo” como un celular. A final de cuentas estamos ante una cinta de terror adolescente que se apega a los clichés preestablecidos por antecesoras como Scream o Destino final, en donde los personajes van cayendo uno a uno, víctimas de un verdugo indolente, maquiavélico e inconmovible. Mientras más se trata de evitar la muerte, uno termina corriendo hacia ella, lo cual es un cliché no solo del género de terror, sino incluso de la ciencia ficción, pensemos en Alien y sus derivados, o hasta las cintas de catástrofes. 

Elizabeth Lail, mejor conocida como Becks en You, interpreta a un personaje igual de exasperante: Quinn Harris, una inexpresiva enfermera que atiende a una de las víctimas de la app Countdown. En teoría, este “juego” informa a su usuario la hora de una muerte ineludible. Incrédula pese a la existencia de dos  casos mortales, descarga el “juego” y se vuelve su presa cuando es acosada por alucinaciones sobrenaturales. 

La hora de tu muerte también es víctima de la falta de pericia de Dec como director. Se nota en un pobre manejo del ritmo –existen lapsos de abrumadora somnolencia–, una pobre dirección actoral en complicidad con un guion incapaz salpimentar con carisma a sus personajes. La cinta es plana, es predecible y se adhiere a trucos audiovisuales para generar sobresaltos en la audiencia. Tal vez un ruidito por aquí, ciertos cortes que generan expectativa por allá, y musicalización tenebrosa para exaltar la tensión. 

En lo que La hora de tu muerte sí funciona es en la manera de sembrar paranoia en el espectador al pensar en la posibilidad de descargar la app –la cual sí existe, por cierto, como parte de una estratagema mercadológica–. Fuera de eso, el eje motor del filme es una mezcla entre momentos de tensión inestables y la cosecha de risas involuntarias, especialmente en el segundo y tercer actos, cuando se añaden personajes a la travesía de la protagonista. 

La película era un buen pretexto para hacer comentario social sobre lo perniciosa que puede ser la tecnología, pero rehuye de esta táctica bien implementada por Black Mirror. La única motivación de sus personajes es sobrevivir, pero no hay mayor exploración sobre ellos. No obstante,  probablemente lo más inadecuado de La hora de tu muerte es la obligatoriedad con la cual se insertan problemas de acoso laboral-sexual serios con banalidad. 

En una de las subtramas, se ve cómo Quinn es rondada por su jefe, un médico con control sobre su carrera y, quien al verse rechazado en sus intenciones, reacciona con sordidez. La cinta es tibia en su manejo del tema y conduce a la protagonista a la misma mezquindad que pretende combatir. Además, hay un pobre manejo temático que parece más oportunista que acertado. La hora de tu muerte en sí misma es una sentencia para quien quiera verla como algo más que un paliativo para matar un profundo aburrimiento.

¿Quieres ser un emprendedor o emprendedora?
Conoce Emprendedor.com el mejor contenido de Ideas de Negocio, Startups, Franquicias, e Inspiración, síguenos y proyecta lo que eres.

autor Mis pasiones: el periodismo, el cine, los libros, la televisión y todo contenido sobre derechos humanos. Fan declarada de los musicales.
Comentarios