Michael Bay exigió a Ben Affleck «ser sexy» en Armageddon
"Ni siquiera pensé en el hecho de que la premisa básica de la película era totalmente absurda", confesó el actor.
¿Qué se necesita para salvar al mundo? ¡Pues trabajadores de plataformas petrolíferas y mucha, mucha, mucha sensualidad! Al menos eso plantea Armageddon, aquella exitosa película de 1998 donde Ben Affleck interpreta a uno de los heroicos perforadores que deben volverse astronautas y viajar al espacio para hacer estallar un peligroso asteroide. La misión exigía que el personaje entrenara durante doce días en la NASA. Pero en el plano de lo real, Affleck tuvo que someterse a un tipo de preparación muy distinto… Ni más ni menos que un régimen de belleza.
Conversando con Matt Damon para EW, Ben Affleck rememoró que el director Michael Bay y el productor Jerry Bruckheimer fueron muy estrictos con la apariencia física de AJ Frost, su papel en Armageddon. La insistencia era del tipo «¡tienen que ir a la cama de bronceado», de acuerdo al actor. Pero no conformes con ello, los cabecillas de la película también le encomendaron asistir al gimnasio e incluso acudir con un dentista.
«Me hicieron arreglarme los dientes, hacer ejercicio y ser sexy«, confesó. «[Se trataba de] correr en el gimnasio, ponerte aceite en el cuerpo y esas cosas. Y [la película] resultó ser una extensa versión de uno de esos calendarios con hombres en topless, en un garaje, cargando un neumático, un poco engrasado. Michael tuvo la visión de un torso masculino reluciente con el aceite, y dijo: ‘¡Eso irá en el tráiler y venderá boletos!’«
Semejante demanda de sensualidad iba ligada a que Ben Affleck parecía estarse convirtiendo en el «chico de las grandes películas» mientras que Matt Damon devenía el «chico serio» dentro de la dupla de Mente indomable. Al menos así era la percepción del público, según comentó Damon en la misma plática, quien además reconoció cuán increíble era el elenco de Armageddon, con personalidades como Bruce Willis, Owen Wilson, Billie Bob Thornton, Liv Tyler y Steve Buscemi.
Aquella cinta de desastres tuvo un costo aproximado de $140 millones de dólares. Y si bien la crítica no fue nada benévola con ella —38% en los Rotten Tomatoes— su espectacularidad le permitió recaudar $553.7 millones en taquilla global. El mismo Affleck reconoció haber estado suficientemente impresionado con el nivel de producción como para ignorar los sinsentidos del guion.
«Este era el verdadero Hollywood, que sentí que nunca había visto. Excavaron dos escenarios de Disney para simular enormes cráteres de asteroides, y ni siquiera pensé en el hecho de que la premisa básica de la película era totalmente absurda».
Y agregó:
«¿Por qué están entrenando perforadores de petróleo para ser astronautas en lugar de astronautas para ser perforadores de petróleo? Uno pensaría que la curva de aprendizaje sería un poco más pronunciada en la ruta de los perforadores de petróleo para convertirse en astronautas. Pero fue divertido».
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Antonio G. Spíndola Tengo muy mala memoria. Por solidaridad con mis recuerdos, opto por perderme también. De preferencia, en una sala de cine.
