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CRÍTICAS

Moon Knight: balanza entre conciencia y espectáculo – Crítica Episodio 5

28-04-2022, 8:54:00 AM Por:
Moon Knight: balanza entre conciencia y espectáculo – Crítica Episodio 5

Moon Knight explora la psique de su protagonista en una suerte de terapia convertida en episodio de televisión.

Cine PREMIERE: 4.5
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Estamos a poco de conocer el final de Moon Knight y su episodio 5 nos deja claro que las intenciones de Marvel difícilmente son solamente crear espectáculo. Podrán muchos espectadores ser enemigos de la casa de las ideas y sus producciones. Pero si algo se debe reconocer en todas ellas es su intento de explorar a profundidad a sus personajes. Quizás por ello el MCU ha resultado tan cercano y querido para las audiencias. A pesar de sus chistes, su tono familiar y las tantas otras cuestiones señaladas por sus detractores. 

Se podría decir que en el episodio 5 de Moon Knight, su gran protagonista es el balance. Con el uso de una balanza literal y figurativa, los guionistas aprovechan para explorar a profundidad -de una vez por todas- a su protagonista. Si bien hasta ahora se construyó al personaje con misterio y técnicas narrativas llamativas, en esta ocasión pone todo sobre la mesa para que el público conozca al desnudo a Marc Spector; y a su alter ego Steven Grant. 

La dualidad inherente de una balanza, refleja también la dualidad del protagonista. En aras de buscar un equilibrio, ambas personalidades deberán enfrentarse y encontrar la paz en sí mismos. Aquí el conflicto no va sobre salvar el mundo, sino sobre salvarse a uno mismo. Una suerte de terapia convertida en un capítulo de show de televisión.

Así la balanza de Tueris también funciona con dos intenciones: entretener con el espectáculo y conversar sobre los problemas psicológicos ocasionados por el trauma. Asilo quizás pueda ser tomado como una representación gráfico-narrativa del aquel apotegma utilizado constantemente en la psicología: «infancia es destino». 

En la entrega anterior Marc Spector fue asesinado por Arthur Harrow ante la tumba secreta de Alejandro Magno. Tanto éste como su segunda personalidad, fueron enviados a una suerte de hospital psiquiátrico. Un lugar lleno de decorados diversos de sus aventuras a lo largo de los episodios anteriores. Y muchas caras familiares. Su paseo por los pasillos desemboca con el encuentro de una hipopótamo parlante. 

¿Todo lo que vimos fue una imaginación o nuestro protagonista está en un limbo? El reciente episodio es quizás el que presenta más respuestas. Similar al penúltimo de WandaVision, la narrativa de este capítulo nos invita por un viaje de introspección a través de la conciencia y los recuerdos de un hombre perturbado. 

Resulta agridulce corroborar que ninguna resolución con respecto a estos personajes podrá ser satisfactoria. Marc y Steven transitan sobre caminos tortuosos y en ocasiones un poco duros para una serie familiar diseñada por Disney. Maltrato infantil, alcoholismo, asesinatos y trastornos psicológicos son los fantasmas que rondan a la historia. 

Quizás la dureza de varias secuencias es el motivo principal por el que en ocasiones el episodio se siente apresurado. Uno de los pequeños fallos de Asilo es que brinda muchas respuestas y no permite un respiro al espectador. No se tratan de secuencias de acción exhaustivas que suceden una tras otra. Sino de escenas con una carga emocional importante que deberían meditarse con cuidado.

A pesar de ello, se nota el compromiso de guionistas y director para tratar con respeto un tema tan delicado como lo es el de los trastornos psicológicos. Un punto a favor de su guion es que no intenta explicar la causa-efecto y consecuencia de los traumas con términos freudianos o junguianos, sino que basa toda su explicación en imágenes o espacios que representan etapas, momentos o recuerdos. 

Para tal propósito la puesta en escena y la dirección de Mohamed Diab son fundamentales. Los diseñadores de producción una vez más están a la altura, no en la construcción de espacios espectaculares o atractivos a la vista. Sino porque son creados meticulosamente para mostrar la personalidad de sus personajes, o para empujar al espectador hacia cierto estado anímico. 

Desde luego no se puede pasar por alto la actuación de Oscar Isaac. En el capítulo 5 de Moon Knight es quizás en donde muestra lo mejor de su capacidad actoral. A pesar de tener a dos de él en un mismo cuadro, para el espectador nunca es confuso lograr dilucidar de cuál personaje se trata. Poco importa que el vestuario los distinga, porque son las gesticulaciones y el acento de Isaac los que hacen la diferencia.  

A estas alturas, quizás lo único que resulta preocupante es que se percibe que todavía existe mucho más por conocer antes del cierre. El rumor de su cancelaci acrecentó en días recientes. Pero la realidad es que cada vez queda más claro que Moon Knight fue sobre contar una historia de origen desde perspectivas únicas.

Moon Knight ha tenido capítulos emocionantes, intensos y confusos; pero sin duda éste se distingue. Conformado por una narrativa repleta de símbolos, significados emocionales y actuaciones desgarradoras, Asilo es quizás el episodio más emotivo que ha tenido la serie hasta el momento.

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autor Mi relación más estable es con el cine, la fiesta y la música. Me encanta escribir sobre cine, conocer gente nueva y compartir ideas. Idealista en todo sentido, supongo que es mi rasgo acuariano de ascendente.
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