Buscador
Ver el sitio sin publicidad Suscríbete a la revista
Listas

Paul Thomas Anderson: Ranking de todas sus películas

26-06-2020, 9:49:13 AM Por:
Paul Thomas Anderson: Ranking de todas sus películas

Dueño de una filmografía envidiable, Paul Thomas Anderson parece destinado a convertirse en uno de los grandes directores de todos los tiempos.

La historia del cine dice que ni siquiera los más grandes directores pueden mantener una racha perfecta. Sin embargo, Paul Thomas Anderson parece empeñado en desafiar esta premisa con una filmografía que ha pasado por diversos géneros y estilos sin perder su calidad, y que le ha dado un lugar de honor entre los grandes cineastas de su tiempo.

A continuación el ranking completo de Paul Thomas Anderson.

8. Sydney: Juego, prostitución y muerte (1996)

Paul Thomas Anderson

Paul Thomas Anderson debutó en la dirección de manera envidiable, con una cinta modesta en muchos aspectos, pero que va creciendo para demostrar un prometer futuro que empezaría a cumplirse pocos años después. Para ello el cineasta aprovecha el talento de Philip Baker Hall, John C. Reilly y Gwyneth Paltrow para la exploración de tres personajes tan complejos como fallidos que son entrelazados por sus respectivos demonios, lo que resulta en una relación distorsionada pero que siempre logra preservar una parte importante de su pureza original. No conforme con ello, el creativo aprovecha esta misma emotividad para enfatizar la caída de la tercia en un inframundo brutal, violento y dotado de claros tintes tarantinescos. Esta combinación cimentó las bases de las que suelen ser consideradas dos de las mayores fortalezas del creativo, la construcción de personajes entrañables y la brillante dirección de su elenco, convirtiéndose así en una pieza clave dentro de su obra. Aun así, ha perdido potencia con el tiempo, no por falta de calidad, sino porque se ha visto claramente rebasada por sus filmes posteriores, en los que exhibió una clara maduración en su técnica y estilo con lo que se convirtió en uno de los grandes cineastas de todos los tiempos.

7. Vicio propio (2014)

Paul Thomas Anderson

La confianza obtenida tras años de cosechar una exitosa trayectoria motivó a Paul Thomas Anderson a incursionar en su proyecto más desafiante: la adaptación de un escritor catalogado de inadaptable como Thomas Pynchon. Aun cuando Vicio propio es considerada una de las obras más accesibles del escritor neoyorquino, la historia del atolondrado investigador privado que termina envuelto en el inframundo angelino setentero resultó en una cinta inaccesible para muchos, producto de una premisa sencilla, pero construida sobre bases narrativas elaboradas, una alta dosis de simbología y oscuros tintes de humor. A esto sumemos la presencia de Joaquin Phoenix, cuya profunda inmersión en el personaje central desembocó en uno de sus trabajos más brillantes, pero también en una de sus interpretaciones más extravagantes. Una película que aspiraba a la grandeza absoluta, pero su naturaleza le relegó en el gusto del público y la crítica, al grado que hoy sigue batallando por hacerse siquiera con el estatus de culto. El tiempo le hará justicia.

6. Embriagado de amor (2002)

Paul Thomas Anderson

Paul Thomas Anderson siempre ha asegurado que cada nuevo proyecto debe mucho al anterior. Esto no evita que Embriagado de amor puede parecer el título más discordante en toda la filmografía del californiano, quien luego de una brillante labor en Magnolia (1999) se decantara por una modesta comedia romántica protagonizada por un Adam Sandler cuyo anterior rol protagónico fuera El hijo del diablo (2000). La apuesta funcionó gracias a que el creativo se mantuvo fiel a su premisa al aprovechar las cualidades de su protagonista para construir un personaje sustentado en el fracaso, el desencanto y la extorsión, pero que de un modo termina cautivando a una encantadora Emily Watson. El resultado es una historia de bases trágicas que bien podría tener cabida en el anterior filme del cineasta, pero que se distancia con sutileza hasta alcanzar una ruta dominada por el optimismo propio del subgénero, pero manteniendo la elegancia y sin necesidad de caer en ningún tipo de cliché. No sólo es querida entre el público, sino que suele ser recordada como la película que afianzó a PT Anderson entre los mayores especialistas en la dirección de sus actores tras sacar lo mejor de un histrión encasillado como Sandler, lo que años más tarde le permitiría incursionar en títulos de naturaleza dramática como La esperanza vive en mí (2007) y Uncut Gems (2019).

5. Boogie Nights (1997)

Paul Thomas Anderson

Boogie Nights disparó la carrera de Paul Thomas Anderson no por explorar el mundo de la pornográfica –no fue la primera ni será la última película en hacerlo–, sino por la manera en que la abordó. Esto porque el cineasta dejó atrás las eternas etiquetas que suelen caracterizar estas historias y mostró un auténtico interés por la humanidad de todos sus personajes: personas con problemas reales cuyos deseos por alcanzar el sueño americano los llevaron por rutas que nunca imaginaron y que terminaron por convertirles en objetos del deseo, pero también en auténticos inadaptados, así como en versiones corruptas de sí mismos. Sobresalió por su gran elenco integrado por Julianne Moore, Burt Reynolds y Heather Graham entre muchos otros, todos encabezados por Mark Wahlberg como un joven que asciende como la nueva sensación de la industria gracias a sus atributos físicos y que termina cayendo por culpa de su propio ego. Fue nominada a tres Premios de la Academia para convertirse en la primera cinta del director considerada por el máximo certamen hollywoodense, destacando la terna de Mejor guion para el propio Anderson y que finalmente perdió frente a Ben Affleck y Matt Damon por Una mente brillante.

4. The Master: Todo hombre necesita un guía (2012)

Paul Thomas Anderson ha dado algunos de los personajes más fascinantes de los últimos años, los cuales suelen caracterizarse por una humanidad palpable en su gran expresividad. El cineasta desafío una de sus mayores fortalezas con The Master: Todo hombre necesita un guía, donde aprovechó el talento de Philip Seymour Hoffman y Joaquin Phoenix para un auténtico duelo de actuaciones psicológicas con las que abordó la historia de un veterano de guerra cautivado por un líder sectario. Más destacado aún es que estas decisiones no conducen a una cinta dominada por la sutileza, sino por la tensión contenida a punto de estallar en cualquier momento. Se le recuerda como el último gran trabajo de Philip Seymour Hoffman, así como por marcar un cambio decisivo en Joaquin Phoenix quien desde entonces empezó a decantarse por papeles de una fuerte carga psicológica. No sorprende que muchos la consideren la mejor película en la carrera del director.

3. El hilo fantasma (2017)

Paul Thomas Anderson concibió la historia tras padecer los estragos de una fuerte gripe que le condenó a guardar reposo absoluto y a ceder ante los cuidados de su esposa quien, de acuerdo con el propio director, le atendió como a un niño. El resultado es uno de los grandes romances cinematográficos sobre un hombre obsesionado con el control absoluto sobre todos los elementos que rodean su vida, hasta que descubre los placeres de la sumisión ante una mujer que combate la fragilidad que siempre ha caracterizado su vida para garantizar la subsistencia de un amor que se niega a perder. Una premisa que desafía los viejos conceptos de las relaciones sentimentales para dar una historia sumamente elaborada en su base y estructura ante la gran variedad de elementos simbólicos que la componen. El resultado es una trama tan compleja como el amor mismo y cuya exquisita fusión de emociones derribaron todas las barreras de Daniel Day-Lewis quien terminaría convirtiéndola en su última película tras explicar a W Magazine que “reímos mucho antes de hacerla. Y luego dejamos de reír porque estábamos saturados por una sensación de tristeza. Eso nos tomó por sorpresa. No sabíamos lo que habíamos creado. Era difícil vivir con ello. Y aún lo es”.

2. Magnolia (1999)

La película que demostró la enorme destreza realizadora de Paul Thomas Anderson, quien relata una serie de historias interconectadas por la búsqueda de redención y esperanza, pero también por la incapacidad para escapar del sufrimiento y la tragedia. Una premisa recurrente, pero que sobresale gracias a la brillante construcción alcanzada con cada uno de los personajes principales, quienes en muy poco tiempo exhiben una amplia gama de emociones que más allá de una simple identificación, conducen a una obligada empatía con aquellos que sufren las peores peripecias de la vida. Una titánica labor requirió al que bien merece ser considerado entre los grandes ensambles del cine contemporáneo integrado por Philip Seymour Hoffman, Julianne Moore, William H. Macy, John C. Reilly y Tom Cruise, quienes aprovecharon las potentes bases de la trama para dar algunas de las mejores interpretaciones de sus respectivas trayectorias. No menos memorable es la valentía del entonces joven cineasta, quien desafiara la crudeza de su historia con una lluvia de sapos que se convirtió en una de las imágenes más icónicas de finales de siglo XX y que inspiró toda clase de interpretaciones que siguen siendo debatidas hasta nuestros días.

1. Petróleo sangriento (2007)

La historia de un minero convertido en un ambicioso petrolero es vista como la mayor épica norteamericana del siglo XXI. Equiparada hasta el cansancio con Ciudadano Kane (1941) y El padrino (1972) por su exploración del ascenso y la caída en la búsqueda del poder hasta las últimas consecuencias, su profundización en la complejidad humana a partir de temas como la familia, la corrupción y el fanatismo ante una religión convencional o la adoración capitalista, así como por su grandeza en todos los sentidos: la adaptación realizada por el propio Paul Thomas Anderson a la novela de Upton Sinclair, la exquisita fotografía de Robert Elswit y la brillante interpretación de Daniel Day-Lewis en el que es considerado uno de los papeles más destacados de toda su carrera. Todo bajo la batuta de un PT Anderson que no tendría problemas para afianzarse como uno de los mejores cineastas de todos los tiempos. Obtuvo ocho nominaciones al Premio de la Academia, incluyendo Mejor película y director, pero perdió por coincidir con otra joya contemporánea como es Sin lugar para los débiles de los Coen. Una derrota que no atenta contra su legado, sino que enaltece su leyenda al colocarla junto a otros clásicos que no han sido galardonados con el máximo reconocimiento del cine. Tan magistral que, al igual que el mítico Daniel Plainview, sólo está en competencia con ella misma.

¿Te interesa el mundo del emprendimiento?
Conoce Emprendedor.com el medio lider en contenido de Ideas de Negocio, Startups, Finanzas, Noticias para emprendedores, Franquicias, Marketing, Inspiración, síguenos y proyecta lo que eres.

autor Algún día me uniré a los X-Men, la Alianza Rebelde o la Guardia de la Noche. Orgulloso integrante de Cine PREMIERE desde el 2008.
Comentarios