Once (Dir. John Carney, 2006)
Presupuesto $150,000 dólares
Taquilla $20,710,590 dólares
Recuperó 138 veces su inversión
De origen irlandés, esta película muestra el romance entre un músico callejero y una inmigrante que comparte su pasión por la música. El filme es dirigido por John Carney, quien fuera bajista de The Frames, grupo irlandés al que también pertenece el protagonista Glen Hansard. Sin embargo, el protagónico del filme originalmente pertenecía a Cillian Murphy, quien además produciría el largometraje. Pero el actor se negó a participar al lado de la joven Markéta Irglová, argumentando que no era una actriz profesional, por lo que abandonó el proyecto junto con otros productores. Fue entonces cuando Carney le pidió a Hansard – quien sólo era contemplado para escribir las canciones de la cinta– que protagonizara la historia, y aunque éste se negó por su falta de experiencia, fue convencido gracias a que se trataba de un filme modesto.
La cinta tuvo serias limitaciones económicas durante el rodaje, pues el director tuvo que entregar su salario a los protagonistas y prometerles un poco más en caso de que el filme tuviera éxito en taquilla. Asimismo, se filmó en tan solo 17 días, se aprovechaba la luz natural para economizar y se usaron casas de amigos –quienes también eran extras en algunas secuencias– para disminuir los costos. Finalmente, las escenas en las calles de Dublin se filmaron sin ningún permiso y las cámaras eran colocadas a grandes distancias para que la gente no se percatara de su presencia y para que los actores trabajaran con menor presión.
Tristemente, el filme fue rechazado en numerosos festivales europeos, pero tuvo una excelente recepción en Sundance y en el Dublin Film Festival. Posteriormente, la cinta sería alabada por la crítica –muchos la colocaron en sus listas de favoritas del 2007–, terminaría convirtiéndose en un éxito comercial e incluso ganaría el Oscar a Mejor canción original por el tema “Falling Slowly”, que convertiría a Irglová en la primer checa en ganar una estatuilla. Curiosamente, a pesar del éxito del filme, ninguno de los protagonistas ha mostrado interés por continuar su carrera histriónica e incluso la propia Irglová ha revelado que se pone nerviosa frente al crew.