The Walking Dead: Triggerfinger
De balaceras y desamores.
Advertencia: La crítica contiene spoilers del episodio
Tras un duelo digno de una película del Viejo Oeste en “Nebraska”, el oficial Grimes detona sin querer un enfrentamiento mayor contra los compañeros de los rufianes Tony y Dave. Anochece, los zombies se congregan en dirección a donde se escucharon disparos y tanto Rick como Hershel y Gleen están en un callejón sin salida. ¡Ah, y Lori está inconsciente en el auto donde chocó todavía… a punto de ser devorada por un zombie que desgarra su propia boca mientras trata de atravesar el parabrisas!
¡Vaya comienzo para “Triggerfinger”, noveno episodio de la segunda temporada de The Walking Dead! Es en sus primeros cinco minutos donde comprendemos plenamente el extraño cambio de ritmo de “Nebraska”, dando paso a una muy bien escrita y dirigida historia que aunque no es perfecta, sí pone a este capítulo como uno de los mejores de la temporada.
Esta semana tuvimos bastante más acción que en varios episodios previos en esta misma temporada, pues no sólo se resuelve la tensión con un intercambio de fuego entre humanos, sino con la obvia intervención de los zombies que “habitan” el pueblo cercano a la granja Hershel. El adversario de color –abatido por el sorprendentemente buen tirador Hershel– es devorado vivo por los zombies sin que sus otrora enemigos puedan hacer nada para auxiliarlo y es esa situación tal vez la que da la obligación moral al trío para ayudar al joven y herido Randall, decisión que podría tener consecuencias graves con el resto del grupo (ese método para liberar su pierna debe haber solido más que su impalación). Mientras tanto, Lori resuelve como una auténtica superheroína su situación con el par de zombies en el auto, aunque no nos queda claro cómo un embrión en gestación puede sobrevivir a un choque de aquellas características.
Y entrando en detalle con las ligeras fallas, aunque es evidente el enfoque al amor y desamor entre personajes (particularmente el triángulo Lori/Rick/Shane) y dicho conflicto apunta a un importante clímax en el próximo episodio, la situación entre Glenn y Maggie pasó de un caso de romance en momento de crisis a un episodio de telenovela para adolescentes. Glenn reclama a Maggie que, a causa de su confesión de amor, el quedó incapacitado para ayudar a los demás en un momento clave, para luego rechazarla y romperle el corazón. No es que cosas como estas no sucedan en la vida real, pero en el contexto de la historia y con el desarrollo de personaje que nos han establecido los escritores, eso estuvo fuera de lugar. Ya veremos cómo resuelven esa relación.
Grandes momentos de drama: la discusión entre Carol y Daryl (donde comienza a hacerse evidente la fortaleza de esta valiente mujer), el diálogo y reproches entre Lori y Shane (¿así que sí fue amor, Lori?) y la situación de tensión frente al pobre chico Carl, escenas que nos hicieron olvidar de pronto que hay zombies invadiendo ese apocalíptico mundo. ¿No es hora ya de nominar a uno o más actores de esta serie para algún galardón?
¿Qué pasará entre Shane y Rick en el siguiente episodio “18 Miles Out”? El previo que se mostró nos hace esperar otro episodio lleno de tensión.
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Staff Cine PREMIERE Este texto fue ideado, creado y desarrollado al mismo tiempo por un equipo de expertos trabajando en armonía. Todos juntos. Una letra cada uno.
