The Walking Dead: What Lies Ahead
Tiene todo lo que los fans buscan: muchos zombies y un buen cliffhanger.
Generalmente es un decir, pero ahora sí es aplicable: después de una muy larga espera, The Walking Dead finalmente inicia su segundo año con el episodio titulado “What Lies Ahead” que, como es de esperar, marca la línea que seguirá esta nueva temporada, sin alejarse de lo que ya estamos acostumbrados, claro está.
De entrada, lo primero que hay que mencionar es que en este episodio de doble duración –como lo hiciera el primero del serial– se nota que la dirección actual del programa es alejarse todavía más de la novela gráfica, aunque como siempre mencionaron los escritores, sin dejarla completamente de lado. Para quienes se lo pregunten, en los créditos iniciales aún podemos ver a Frank Darabont como productor ejecutivo, pero nadie sabe a ciencia cierta si sigue involucrado de alguna forma o no (aunque este episodio fue escrito por él).
La trama gira en torno al grupo de sobrevivientes mientras continúan su búsqueda por un lugar para asentarse. En el camino se enfrentan con bastantes obstáculos y entre ellos, la pérdida de Sophia (la otra niña aparte de Carl), durante un momento muy tenso. Ah y “pérdida” implica que se pierde en el bosque, no que muere, no se preocupen, que no es un spoiler. Por cierto, el cliffhanger final sí proviene del cómic, pero puede resultar inesperado ya que es más que notorio que el orden de los eventos ha sido completamente alterado.
Técnicamente todo es grandioso: la dirección de Gwyneth Horder-Payton (también directora del episodio “Tell It To The Frogs” y series como Torchwood, Battlestar Galactica o The Shield) es más que sobresaliente, pues aprovecha las buenas actuaciones del elenco, maneja de forma cinemática los escenarios y sobre todo logra alcanzar un nivel altísimo de suspenso en aquella escena tan impactante del trailer donde los sobrevivientes se esconden debajo de varios automóviles; como ya mencioné, todos y cada uno de los actores se muestran al tope de su talento; y lo más importante: los zombies son más desagradables, originales y realistas que nunca (y en esta ocasión, verdaderamente podemos verlos con mucho detalle, ya serán testigos de esto).
El guión es posiblemente lo menos positivo de todos los elementos, pero no se preocupen que nunca llega a ser ni remotamente negativo. La trama, en realidad, no avanza y los conflictos personales son exactamente los mismos, sin novedad alguna en este frente. Todo viene de la situación antes comentada sobre querer alejarse del material de origen, ya que todo lo que sucede, simple y llanamente no existe en el cómic. Desde que se supo que el título no iba a ser el mismo del segundo volumen (“Miles Behind Us”) –como hicieran con el primer episodio “Days Gone Bye”–, fue una muestra de que el show busca hacerse un lugar sin los comics. Esto puede ir en ambas direcciones, puede ser muy bueno o puede ser lo peor, pero es muy pronto para saberlo.
Al final, es un grandioso episodio y tiene todo lo que los fans buscan: muchos zombies y un gancho para regresar la siguiente semana. Larga vida a los muertos vivientes (sí, eso es paradójico e incoherente).
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Clara Itzel Hernández Valladares Clara Itzel es una comunicóloga junkie de los animales, TV, cine, libros, tatuajes, pop culture, té & café. La pueden seguir en instagram (@MissClaraItzel) y leer en ElMoodRandom.com
