Anne Frank decía en su diario que «tengo la sensación de ser un pájaro enjaulado al que le han arrancado las alas violentamente y en la más absoluta penumbra, choca contra los barrotes de su estrecha jaula al querer volar». Aunque la cuarentena actual no se compara con las vivencias de la joven, es comprensible que muchos se sientan aislados por el confinamiento y nerviosos por la crisis sanitaria que aqueja al mundo entero.
En los últimos días se han escuchado toda clase de recomendaciones para sobrellevar un encierro de este tipo, cuando lo cierto es que el cine y la televisión siempre tuvieron todas las respuestas . Como prueba, este recuento de lecciones para enfrentar la cuarentena .
Mantén la cabeza ocupada
Tal era el caso de Rapunzel en Enredados (2010), quien condenada por Gothel a pasar la vida encerrada en una torre, recurría a toda clase de actividades mentales y físicas para distraerse. Esto incluía “un libro leeré, o tal vez dos o tres, en mi galería algo pintaré. Guitarra toco, tejo, horneo […], rompecabezas, dardos y hacer galletas, papel maché, ballet, y algo de ajedrez, alfarería, ventriloquia y velas, estirar, dibujar, o trepar y coser, los libros releeré, si el rato hay que pasar y pintaré algo más, encontraré un lugar y mi cabello a cepillar y a cepillar”.
La rutina es importante para la salud mental
Hay quienes relacionan el término rutina con un estilo de vida reiterativo y aburrido. Sin embargo, la rutina puede resultad de gran ayuda en situaciones de aislamiento, al mantener la mente ocupada en una misma serie de actividades a realizarse diariamente. Tal es el caso de Desmond Hume (Henry Ian Cusick) de Lost (2004), quien enfrentó tres años de cuarentena con una rutina básica que consistía en levantarse de la cama, escuchar un poco de música, desayunar, lavar sus trastes sucios, realizar distintos ejercicios y ducharse.
Cosecha tus propias frutas y verduras
Son muchos los que alguna vez han pensado en sembrar sus frutas o verduras. Ya sea en esas macetas eternamente vacías que hay en muchas casas o en otros recipientes improvisados, la cuarentena es una buena oportunidad para hacerlo. Esta actividad fue vital para la supervivencia de Mark Watney (Matt Damon) en Misión rescate (2015), pero también para mantenerlo ocupado durante varios días, primero con la construcción de su invernadero y después con los cuidados constantes necesarios para su sembradío, lo que resultó en una vasta cosecha de papas marcianas.
Escribe un libro o un diario
Los blogs y las redes sociales han demostrado que todo mundo tiene algo que decir, ¿por qué no aprovechar para llevar esta práctica aún más lejos? Así lo hizo Johannes Betzler (Roman Griffin Davis), mejor conocido por todos como Jojo Rabbit, que al verse aquejado por las presiones políticas de la Alemania Nazi y por la impresión de descubrir una chica judía oculta en su casa, decidió que lo mejor sería aprovechar su peculiar situación para escribir un libro con las claves para identificar a personas de orígenes semitas. Si el tiempo y la destreza lo permite, la publicación se puede complementar con ilustraciones complementarias como las realizadas por el propio chico. Al principio lo hizo para formar parte de algo, pero con el tiempo fue clave para sobrellevar la angustia del conflicto bélico y cambiar su modo de pensar. Como motivación adicional, vale la pena recordar que William Shakespeare escribió El rey Lear (1606) en reclusión por la peste bubónica, mientras que Mary Shelley concibió a Frankenstein (1818) durante un encierro provocado por las condiciones climáticas del llamado año sin verano ocurrido en 1816.
Aprende cosas nuevas
Adam Webber (Brendan Fraser) de Mi novio atómico (1999) pasó más de 30 años en un refugio nuclear tras una confusión que disparó los peores miedos de su padre. Cuando finalmente salió al mundo exterior era un hombre inocente y quizá algo pasado de moda, pero sumamente preparado en otros aspectos gracias a una estupenda educación casera que le ayudó a aprender todas las materias escolares, hablar varios idiomas, bailar y boxear, entre muchas otras cosas. Quizá la cuarentena no permitirá dominar todas estas disciplinas, pero sí representa una oportunidad perfecta para realizar esa actividad para la que nunca había tiempo suficiente, lo que puede ir de lo más tradicional como aprender a cocinar, tocar un instrumento o a opciones más novedosas como iniciarse en la programación o en la construcción de páginas web.
No pierdas de vista el mundo exterior
La cuarentena actual consiste en un aislamiento preventivo al interior del hogar, pero para nada nos impide mirar al exterior desde una distancia segura. Así sucedió en La ventana indiscreta de Alfred Hitchcoch, con L.B. 'Jeff' Jefferies (James Stewart) postrado en una silla de ruedas por una lesión en la pierna y resignado a mirar a sus vecinos desde el lente de su cámara, lo que le permite ver discusiones familiares, sensuales bailes, excentricidades caninas y un potencial asesinato. Esta medida ha sido sumamente útil para la salud mental de algunos países europeos, que han aprovechado estos vistazos al mundo exterior para iniciar actividades comunitarias como cantar en los balcones, jugar o aplaudir para reconocer a los profesionales que siguen trabajando por todos.
Evita la soledad... aunque tengas que inventar un compañero
Enfrentar la cuarentena en compañía ya es complicado, pero hacerlo en soledad es mucho peor. Nadie mejor para ejemplificar el aislamiento extremo que Chuck Noland (Tom Hanks) en Náufrago, lo que le lleva a aprovechar un balón, una herida sangrante y algunas plantas para la creación de Wilson, un compañero invaluable con el que comparte actividades y conversa diariamente sobre distintos temas. Al final, el simpático juguete fue determinante para que el personaje central no sólo salvara la vida, sino mantuviera la cordura en los momentos de mayor desesperación.
Diviértete y baila
Los especialistas aseguran que la actividad física es fundamental para relajarse y el cine ha seguido la recomendación con el baile. Un ejemplo es Joel (Tom Cruise), quien no padecía un confinamiento físico en Negocios riesgosos (1983), sino emocional por su edad y las continuas presiones de sus padres. Por ello, cuando estos se van de viaje, el joven aprovecha para liberar tensión con un mítico baile que ha sido replicado hasta el cansancio. Mención aparte para Jojo Rabbit (2019), con Rosie ansiosa por danzar al asegurar que es una actividad “para personas libres. Es un escape a todo esto”.
Escucha mucha música
La música siempre ha tenido un carácter liberador, pero estas propiedades se magnifican aún más durante un confinamiento. Al menos así lo considera Red (Morgan Freeman) en Sueño de fuga (1994), luego de que Andy (Tim Robbins) aprovechara un descuido de las autoridades para poner un poco de ópera en la prisión de Shwashank: “a la fecha no tengo idea sobre lo que cantaban esas dos damas italianas. La verdad, no quiero saberlo. Es mejor que algunas cosas queden sin decirse. Me gusta pensar que cantaban sobre algo tan hermoso que no puede expresarse en palabras y haga que el corazón duela por ello. Te digo que esas voces se elevaron más y más lejos de lo que cualquiera en un lugar gris se atrevería a soñar. Era como un hermoso pájaro que se agitaba en nuestra pequeña y monótona jaula e hizo que esas paredes se disolvieran, y por un breve momento, hasta el último hombre en Shawshank se sintió libre”.
Saca el máximo provecho de tus libros
Muchos amantes de la lectura podrían el resguardo de Sam Hall (Jake Gyllenhall) en El día después de mañana, quien tenía a su disposición toda la Biblioteca Pública de Nueva York. Aunque la llegada de la nueva era de hielo le obliga a usar incontables libros para avivar un fuego que garantice su supervivencia, otros personajes le recuerdan el verdadero valor de estos objetos: tal es el caso de la bibliotecaria, quien aprovecha una publicación médica para diagnosticar la septicemia de Laura (Emmy Rossum), o el visitante recurrente del inmueble que rescata la Biblia de Gutenberg al considerarla “el amanecer de la Edad de la Razón”. La cuarentena actual no justifica la quema de ningún impreso, pero sí que es el momento perfecto para tomar ese libro que todos tenemos pendiente desde hace tiempo.
Disfruta muchas películas, sobre todo de tu favorita
Si Robert Neville (Will Smith) sobrevive a las criaturas de Soy leyenda (2007) es en buena parte por su disciplina militar, que incluye un horario de actividades perfectamente bien establecido que culmina cada noche con un encierro absoluto. Pero ni siquiera él puede resistirse a un poco de diversión con numerosas visitas regulares a su videoclub favorito. Mención aparte para Shrek (2001), la cual ha visto en tantas ocasiones que es capaz de recitar los diálogos de todos sus personajes. ¿Quién no tiene una película o serie así? La cuarentena representa una oportunidad perfecta para verla una o muchas veces más.
No descuides las fechas especiales
Quedarse en casa es una medida de precaución importante para los tiempos que corren, pero no significa que tus fechas importantes como serían cumpleaños o aniversarios deban pasar desapercibidas. Quizá los festejos no concuerden con tus planes originales o no haya regalos de por medio, pero que esto no te impida celebrar de manera física o incluso virtual con las personas que más quieres en el mundo. Como prueba Mitch Emhoff (Matt Damon) en Contagio (2011), quien temeroso por la salud de su hija adolescente, le organiza una modesta fiesta de graduación en casa con su novio previamente inmunizado como único invitado. Soluciones excepcionales para tiempos extraordinarios que nos tocó vivir.
Olvida las diferencias con otras personas
El coronavirus ha exhibido lo peor de muchas personas que aprovechan el padecimiento para externar abiertamente su clasismo y xenofobia. Sin embargo, la pandemia también ha sacado lo mejor de muchos otros que no vacilan en ayudar al prójimo en estos tiempos de crisis, lo que ha conducido a una serie de reflexiones sobre la necesidad de un mundo más unido del que tenemos ahora. El club de los cinco (1985) ya puso este tema sobre la mesa al introducirnos con cinco jóvenes enviados a detención y cuyas distintas personalidades los hacen batallar durante su castigo, al menos hasta que descubren que no son tan distintos como pensaban al compartir toda clase de problemas, pasiones e inquietudes. Así concluyen que “cada uno de nosotros es un cerebro, un atleta, una irresponsable, una princesa y un criminal”.
Dile a tu familia y amigos lo mucho que los quieres
Es fácil pensar que todas las películas sobre pandemias comparten la idea de un virus que atenta contra la humanidad. Sin embargo, muchos de estos títulos también coinciden en que sus personajes manifiestan su amor a sus seres más queridos. Tal es el caso de Sam Daniels (Dustin Hoffman) que se reconcilia con su esposa en Epidemia (1995); Ally Hextall (Jennifer Ehle) toma la mano de su padre enfermo en Contagio (2011); Gerry Lane se reencuentra con su familia tras una larga travesía en Guerra mundial Z (2013). Esta cuarentena es una buena oportunidad para revisar prioridades y no perder de vista lo que en realidad es lo más importante.
Aprendamos a valorar la vida
El disfrute del exterior parecía garantizado, hasta que la pandemia nos obligó a quedarnos en casa. Aunque la diversión es importante para garantizar la salud mental durante esta cuarentena, también es buen momento para reflexionar sobre esos pequeños detalles que dan valor a nuestra vida. Tal fue el caso de Tod Lubitch (John Travolta) en El chico de la burbuja (1976), sobre un joven cuyas fallas en el sistema inmune lo obligan a vivir recluido, hasta que decide desafiar todos los pronósticos para tener algunos momentos normales. A diferencia de este personaje, el confinamiento pasará y podremos regresar a la vida normal, pero será importante no olvidar las lecciones aprendidas durante estos momentos.
Luis Miguel Cruz Algún día me uniré a los X-Men, la Alianza Rebelde o la Guardia de la Noche. Orgulloso integrante de Cine PREMIERE desde el 2008.